domingo, 26 de diciembre de 2021

TOCANDO CON MI VIEJO TAMBOR

Para quienes somos creyentes, la navidad es una época de renovación, de esperanza. El nacimiento de Jesús, el Salvador, en un humilde pesebre en Belén, dejó su huella para siempre en la historia. La misión redentora de Jesús, inicia en la modestia más extrema, naciendo en el sitio donde se guardaba a los animales del frío invierno. En esta época incluso nieva en Belén y alrededores. Así que imaginemos ese refugio, donde sólo había paja como lecho, para quien vino a redimir a la humanidad. Gracias a la tradición, seguida por varias generaciones de mi familia, desde su llegada a Chile, recibí el tesoro de la fe. Así, pude disfrutar desde que tengo memoria, de los ritos y solemnidades que la Iglesia Católica, celebra a lo largo y ancho del país. Esta navidad de 2021, es especial, porque llega después de un año lleno de vicisitudes producto de la pandemia. Muchos hogares vivieron la tragedia de la partida de un familiar, o padecieron la angustia de una dura enfermedad. Cientos de miles de personas sufrieron la pérdida de su trabajo, y si volvieron a trabajar, lo hicieron en condiciones precarias. Millones de chilenos y chilenas, debieron hacer uso de sus ahorros previsionales, del dinero que tenían para financiar una escuálida pensión, para pagar deudas, o parar la olla. A la preocupación por el sustento diario, por conservar el empleo, por pagar las obligaciones, se sumó una incertidumbre por el mañana. Las elecciones presidenciales se desarrollaron en un clima de polarización, pocas veces vista. Muchos recordaron el plebiscito de 1988, porque las opciones en juego, parecían ser el cielo o el infierno, dependiendo del punto de vista. A Dios gracias, la forma en que se resolvió la elección presidencial del 21 de diciembre, con claridad y contundencia, despejó de inmediato, el rumbo que la inmensa mayoría del país, quiere seguir. Llegamos entonces a esta navidad de 2021, después de un año plagado de desafíos y pruebas, con una esperanza renovada en el futuro. Nuestro país, tensionado a grado extremo, por una campaña política despiadada, logra aliviar la presión, soltar toda la energía acumulada. Los actos de celebración por el triunfo electoral, en todos los rincones de la patria. Fueron un rito de sanación. Vecinos que estaban peleados, familiares enojados, por causa de la política, volvían a encontrarse. La limpia y pacífica alegría de un pueblo, fue capaz de alejar las preocupaciones, las incertidumbres, las angustias. Por eso que esta navidad fue distinta. Porque dejado de lado, el enfrentamiento electoral, y facilitado por el discurso convocante y fraternal del presidente electo, pudimos celebrar en paz, y todos juntos. Se han multiplicado los gestos de todo tipo, de las personas más variadas, y diversas, gestos de amor por los demás, deseos de encuentro, de entendimiento. Tuve el privilegio de leer la reflexión que hacía una joven mujer, profesional, trabajadora. Una persona de centro derecha, destacando lo bueno que era para Chile, ver la alegría de la gente, celebrando en paz. Destacando que, pese a las diferencias políticas, se veía en el presidente electo, el deseo genuino por mejorar el país. Relevando la importancia de la inclusión y del respeto. Seguro que a algunas personas les parecerá de Perogrullo, pero no a mí. Yo rescato la verdad que hay en esas palabras, la bondad de ser capaz de reconocer en el otro, virtudes, aunque haya sido un adversario. Para mí, amigos y amigas, esta reflexión sintetiza, el anhelo de un país completo, que quiere reconciliarse, que quiere vivir en paz. Ni siquiera es necesario ser cristiano, ni católico, para pensar así, sólo se requiere ser humano. Tener la capacidad de conmoverse, de emocionarse por lo que le sucede a los demás. Esta navidad, nos deja un sabor dulce, somos más cercanos, tenemos todos, una tarea que nos obliga a caminar juntos. La construcción de un futuro más próspero, que llegue a cada rincón de la patria, nos exige a todos, la actitud de esa valiente mujer, que no temió lo que dirían los demás, sólo dijo lo que salía de su corazón. Eso es lo que se espera de nosotros, que seamos capaces de derribar las vallas que nos separan, cruzar la calle, tender el puente, para acercarnos. El espíritu navideño, se contiene en esas acciones. No son los regalos, ni las compras, son gestos de amor, de desinterés, de generosidad. Nos falta muchos gestos de fraternidad, de amistad cívica, de mirarnos sin juzgar. Ser capaces de acoger al que piensa distinto, es el primer paso para sanar las heridas internas de nuestra sociedad. Es una tarea hermosa, que me llena totalmente el corazón. Poder tender la mano a todo el que lo necesite, a todo el que lo pida, sin mirar militancias políticas, ni credos religiosos. Esa es una tarea que podemos iniciar, en cada casa, en cada barrio, en cada lugar de trabajo. Y estoy seguro, que, si le hacemos empeño, nuestra vida se llenará de significado, los momentos felices no serán sólo en las fiestas. Y no tendremos que esperar una nueva navidad, para decir que nos amamos, decir que nos necesitamos, para, en definitiva, vivir la vida que soñamos. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 27 de diciembre 2021.-

domingo, 19 de diciembre de 2021

A CUMPLIR

Contra el pronóstico de agoreros analistas, que daban por muy ajustada la diferencia, entre los Boric y Kast. Finalmente, la elección se resolvió con absoluta claridad en favor del joven diputado magallánico. De nada sirvió el desenfadado apoyo del gobierno de Piñera y todo su gabinete, no bastó el apoyo de una prensa servil, y medios incondicionales. La verdad se impuso, y la ciudadanía, haciendo gala de una responsabilidad y sabiduría singulares, rechazó categóricamente, la candidatura de ultra derecha. El proyecto neo conservador, la restauración conservadora, fue derrotada por una diferencia, muy cercana al millón de votos. No fueron 50 mil votos de diferencia, como había anticipado Kast. Y las amenazas de objeciones masivas de votos, y denuncias de fraude electoral quedaron en lo que eran, meras bravatas sin sustento. En las regiones del centro y norte del país, los votantes debieron resistir temperaturas superiores a los 35 grados. Con serios problemas de transporte, por la escasa frecuencia de buses, en relación al volumen de personas en los paraderos. Como un modo de paliar en parte, esta aparente falla, del sistema, algunos alcaldes metropolitanos, dispusieron de buses municipales, para acercar a los electores, a lugares de votación. Finalmente, la voluntad de un pueblo entero, no se pudo detener con zancadillas. Gabriel Boric, el joven diputado de Magallanes obtuvo más de cuatro millones seiscientos mil votos, con un porcentaje del 55,87% de los votos. Su rival José Kast, sólo obtuvo en 44%. Cifra esta última muy similar, al 43% que obtuvo el dictador, en el plebiscito de 1988. Finalmente, todo condujo a que esta elección, se transformase, en una versión remasterizada del plebiscito aquel. Gabriel Boric, se convirtió en el presidente que obtuvo la mayor votación en números absolutos y en el presidente más joven que haya asumido jamás en nuestra república. Por delante se traza un camino, lleno de sinuosidades y de curvas, no será un camino fácil para el gobierno de Boric, desde marzo en adelante. La rebaja del gasto fiscal, ya incorporada en el presupuesto de la nación, con un 22,5 %. El magro crecimiento económico proyectado por el Banco central, de sólo 2% para el 2022, y una cifra cercana al 3% para el 2023, hacen que la perspectiva del futuro gobierno, sea más bien moderada. Un desafiante programa destinado a garantizar derechos sociales, parece chocar desde ya, con un escenario de frenazo en la actividad económica. Lo central de la conducción económica, de controlar las variables macro económicas, y mantener a raya la inflación, son compromisos asumidos con una actitud muy responsable, por el futuro presidente. El gobierno de Gabriel Boric, va a convivir con un parlamento, que se encuentra virtualmente empatado. Especialmente en el senado, el llevar adelante la agenda legislativa, que le dará viabilidad a su programa de gobierno, va a requerir el establecimiento, de una política de diálogo, de entendimiento. Lo destacó desde su primer discurso como presidente electo, demostrando lo mucho que ha ido matizando sus posturas, y cómo ha ido incorporando una importante cuota de realismo. Los gestos que Boric hizo a las figuras presidenciales Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, durante la campaña, hablan más que mil palabras. Es una mirada que revaloriza, a estos verdaderos estandartes, del proceso de recuperación democrática. Es un acercamiento estratégico, pero también, es el reconocimiento de “estar subido en hombros de gigantes”. Es un legado político, otrora despreciado, y hoy recalificado, como necesario, para poder llevar adelante un programa de gobierno transformador. La reactivación económica, y recuperación del empleo, son centrales ahora, en el remasterizado programa de Boric. Mantener la inflación a raya, y a la vez poder seguir reduciendo el déficit fiscal. Será clave la decisión de nombramiento en el equipo económico. No se descarta, que sea en esta área, en la que el presidente electo Boric, incorpore alguna de las figuras de la centro izquierda. Este sector abunda en economistas de fuste, y varios han participado ya en los equipos programáticos de Boric. Por lo que no sería para nada raro, que se nombre a alguno (a) de estos, en Hacienda o economía. La presión para que el presidente Boric, cumpla su programa, van a ser intensas y desde antes del día uno. Es la hora de la verdad. Pero también es la hora de la innovación y de la creatividad. Existe hoy una estructura de gobiernos regionales, nunca antes vista. Con gobernaciones regionales en las 16 regiones, con una misión descentralizadora, que puede ser una enorme oportunidad para el nuevo gobierno. Si creemos lo que ha dicho varias veces, Gabriel Boric, su gobierno va a eliminar la figura de los delegados presidenciales. Traspasando mayores atribuciones y facultades a los actuales gobernadores regionales. Esta perspectiva abre una posibilidad cierta, de llegar más directamente a la población más vulnerable, y también a los emprendedores, a los desarrolladores, a los innovadores. Las expectativas generadas en la población, por la campaña de primera y segunda vuelta, son enormes. Algunas sobredimensionadas. Así y todo, a partir de marzo, llega el momento de cumplir los compromisos. La forma en que se va a dar cumplimiento a los mismos, va a ser clave, en la estabilidad social del futuro gobierno. Más aun con la estructura política dispersa, que se consolida en el parlamento. Lo dice el propio Boric, en su discurso de celebración, la existencia de una dispersión de fuerzas políticas, pertenecientes a más de una alianza o pacto, obligará a dialogar, a conversar. Esa vieja y vilipendiada, práctica, de ver la política no como un juego de suma cero, donde te llevas todo o no te llevas nada. En el nuevo gobierno, el dialogo, se implementará tanto en la relación con el parlamento, como en la relación con los gobernadores regionales. Es aquí en el territorio, donde se juega parte importante del éxito político del gobierno de Gabriel Boric, y él como el primer presidente magallánico, honrará su palabra traspasando nuevas facultades a los gobernadores, y eliminando la centralista figura del delegado presidencial. La noche del 19 de diciembre, Chile entero, se acostó con sueños de justicia social, con anhelos de grandeza, de libertad y de dignidad. Amanece hoy, con la tranquilidad de haber dado un paso importante, y de que vendrán muchos otros. El Chile que viene, es de encuentro, de reconciliación, nadie sobra en este camino, que será largo y pedregoso. Pero una vez más, será más fácil si entramos en esta nueva senda, como la gran familia que somos, todos juntos. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 20 de diciembre de 2021.-

domingo, 12 de diciembre de 2021

SEGUIMOS

En la última semana, hemos podido ver sendos debates de los candidatos presidenciales Boric y Kast. Sobre el particular, podemos comentar que los sucesivos estudios de opinión, que dan por vencedor a Boric, parecen estar causando mella en la estrategia de campaña del candidato de ultra derecha. Las medidas más polémicas de su programa de gobierno, que han sido publicitadas y comentadas, por todas partes, rápidamente están siendo suplantadas por otras. Así ocurrió con la eliminación del Sernam, ahora Kast dice que “Escuchó a las mujeres”, y plantea que mantendrá el Servicio Nacional de la mujer, como si fuera una concesión de su parte. Lo mismo sucedió con la privatización de Codelco, echó pie atrás, por el firme rechazo de los trabajadores de la minería del Cobre, y las críticas transversales, por lo que eso haría a las arcas fiscales. La rebaja de impuestos, que era celebrada con alborozo por los grandes grupos económicos, también pasó a mejor vida. Un país con un déficit fiscal abultado, producto de las medidas sanitarias, los impulsos a la reactivación, y un largo etcétera, hacen inviable cualquier rebaja de tributos. En resumen, las propuestas de Kast de segunda vuelta, contrastan y se contraponen, no sólo a quien va en la pole position, sino también se contraponen con el candidato Kast de primera vuelta. ¿A qué propuestas creerles?, no parece importarle a sus fervientes, y apasionados seguidores. Mientras explica las contradicciones, e incluso niega en cámara aspectos del programa, que son leídos en vivo, se presenta impertérrito, impasible. Su expresión, resulta inquietante para muchos, y es comentario de expertos. Puede decir las barbaridades más grandes, sin mover ni una ceja, sin alzar la voz. Así pasó cuando un periodista le pregunta incrédulo, si era cierto, que pretendía, contar con facultades para ordenar detenciones de persona en lugares que no fueran cárceles. Respondió sin pestañear: “Sí”. El periodista estupefacto, le retrucó, “. pero eso era lo que hacía la Dina y la CNI”. Y así siguió adelante, el candidato a quien los medios, le brindan amplia y benévola cobertura. Mientras tanto en el Chile real, los trabajadores temen por la mantención de sus empleos, la máquina de campaña de Kast, opera como la de Trump, difundiendo toda clase de noticias falsas. Se anuncia despidos masivos y cierre de empresas, si vence el candidato de la oposición. Contra esa campaña de mentiras, de injurias y calumnias, la campaña de Gabriel Boric, ha desplegado decenas de miles de voluntarios por todo Chile, para difundir las medidas más importantes de su programa. Una pensión universal garantizada de 250 mil pesos, llegar durante su mandato a un ingreso mínimo de 500 mil pesos. El fin de las AFP y su reemplazo por un sistema público, que administrará los fondos previsionales, con financiamiento tripartito. Una batería de medidas de reactivación económica, apoyo a las pymes y promoción del empleo. Múltiples figuras de la ex concertación, han expresado su apoyo a Boric. Quizás el más importante, por lo que representa, es el presidente Ricardo Lagos, con quien el propio candidato, expresó haber conversado durante varias horas. “Tenemos diferencias políticas, pero lo respeto, y me interesa contar con su opinión y su experiencia”. Una pléyade de economistas de prestigio internacional, que provienen de centros de estudios, universidades, o de instituciones privadas, se han incorporado al equipo de Boric. Otro símbolo político máximo, y una de las personalidades más queridas en Chile, este domingo arribó al país, la presidenta Michelle Bachelet, a pasar las fiestas con la familia como cada año. El próximo domingo 19 de diciembre, ella también estará votando por Gabriel Boric. La centro izquierda, sin formar parte de la alianza de gobierno, será garante y velará por la estabilidad política de Chile. Importantes figuras del Partido Socialista, los ex presidentes Camilo Escalona y Osvaldo Andrade, así lo expresaron. El PS brindará su apoyo y colaboración para que Boric sea presidente, y para que su gobierno pueda llevar a cabo las transformaciones que Chile requiere. Este importante respaldo, sin condiciones ni repartijas de cargos, ni cuoteos, tiene fundamento. Lejos está el candidato Boric, de las caricaturas que la derecha ha hecho. Él, ha sido tajante en denunciar a los regímenes dictatoriales, que se asocian a la izquierda. Y por, sobre todo, se ha mostrado independiente y marcando distancia, con la cúpula del PC. Ha mostrado moderación en sus posturas, y se muestra hoy día, como el líder de un movimiento cercano a la social democracia europea, de la que se declara admirador. No por nada, su imagen recorre el mundo, como quien se enfrenta a un candidato que encarna, a un sector de la derecha pinochetista. Varios lo han dicho ya. La elección del domingo 19 de diciembre, pone a Chile, ante una alternativa del pasado y una alternativa de futuro. Kast, invita a revivir un país que ya no existe. Un país donde el orden nace del control, de la intimidación, de la amenaza, y de la restricción de las libertades. Es una invitación a la radicalización del odio, un salto al vacío, que no sólo será malo para quienes somos de izquierda, sino que será malo para todos los chilenos y chilenas. Boric, en tanto, encarna el Chile del futuro, el que nos invita a soñar, a tener esperanza. No es una invitación, libre de dificultades, se sabe que nunca los cambios han sido fáciles. Pero es el cambio que Chile necesita, para poder retomar la senda de progreso. Para volver a crecer, debemos hacer reformas, largamente postergadas. Esta es la opción que yo he abrazado, porque creo en la bondad de los seres humanos. Creo que podemos avanzar todos juntos. Creo que nos necesitamos, nadie sobra, y todas las manos harán falta de marzo en adelante. Así se han construido las poderosas naciones del norte de Europa. Así superaron guerras y hambrunas, y así lo haremos nosotros también. Dejando de lado el discurso de odio, dejando de lado la mentira, que es la puerta de entrada de todos los males. Apostando al futuro, por la paz, por la estabilidad, por la verdad. Ernesto Sepúlveda Punta Arenas, lunes 13 de diciembre 2021.-

domingo, 5 de diciembre de 2021

¿TRABAJADORES O ASOCIADOS?

La creciente incorporación de las nuevas tecnologías, al ámbito del trabajo, conlleva una actualización de un enfrentamiento, o contraposición, que ya se dio a inicios de la revolución industrial. En aquel tiempo, la introducción de la máquina de vapor, a la producción industrial, a la explotación minera y al transporte, permitió realizar labores, otrora, altamente intensivas en uso de mano de obra, con unas cuantas cuadrillas de trabajadores. La llegada de esta tecnología, significó una nueva organización del trabajo, la maquinaria impulsada por vapor, no necesitaba detenerse a descansar, como aquellas impulsadas por el hombre o por tracción animal. Una nueva forma de explotación de la mano de obra, significó la multiplicación de muertes de trabajadores, debido a las infra humanas condiciones de higiene y seguridad. Las tecnologías nacidas, para dar un reimpulso al desarrollo capitalista, también significaron un impacto en la sociedad. Nuevos hábitos de consumo, de las clases acomodadas, que ahora podían realizar viajes transatlánticos a cualquier lugar del planeta. Un aumento de la producción sin precedentes, generó la necesidad de contar con más materias primas, y más trabajadores. Junto a este fenómeno de desarrollo acelerado de la industria, surgió con fuerza una discusión, acerca de los límites, a los que se podía llevar al hombre, puesto a trabajar en línea con las máquinas. Surgieron cuestionamientos, por la cantidad de trabajadores que quedaban sin trabajo, o reducidos a labores de “asistencia” o de alimentación de las líneas de producción mecanizadas. A ese movimiento de rechazo a la introducción de tecnologías, desconocidas para la época, se le llamo “maquinismo”. Y fue uno de los incentivos, para la organización obrera, el surgimiento de los primeros movimientos huelguísticos, y la conformación de los partidos políticos de la clase trabajadora. A fines del siglo XIX en todo el mundo, incluidos los territorios “de ultramar” (que correspondían a las colonias, y a los territorios, recientemente independientes), surgieron también movimientos reivindicatorios. A inicios del siglo XX, hasta la iglesia católica empezó a preocuparse de la condición de explotación de los trabajadores. Fue lo que se llamó “La cuestión social”. La primera guerra mundial, precipitó el colapso de las potencias no industrializadas. Uno de los más afectados fue el imperio ruso. Asolados por el hambre, sin calzado, y mal vestidos, los campesinos rusos enviados a la guerra, se negaron a continuar luchando, y volvieron a Rusia. La autocracia zarista, intentó contenerlos, reprimiendo, pero era demasiado tarde. Surge una potente organización política nacida, al fragor de las luchas sindicales, y potenciada por la crisis económica terminal del imperio. Los trabajadores y los soldados asaltan el poder, e instauran el primer régimen socialista de la historia. Sus principales emblemas fueron “Pan, techo y trabajo”. La derivación hacia un régimen autocrático, represor y sanguinario, durante más de 70 años, fue el trágico y triste final, de ese intento por reivindicar un rol protagónico para los trabajadores en la sociedad. A ciento veinte años de la revolución rusa, las relaciones entre patronos y obreros, ha cambiado radicalmente. Lo común no es el trabajo industrial, en una línea de producción. Jornadas extenuantes, que se inician al toque de un silbato en la mina o la fábrica, han quedado en el pasado. Estamos hoy día, enfrentados a una realidad, que supera todo límite. La tecnología ha masificado medios de comunicación virtuales, de bajo costo, con conexión permanente a internet. Fácil acceso a dispositivos electrónicos, cada vez más baratos, ha cambiado las relaciones interpersonales. Y también el trabajo. Las personas viven conectadas el día entero. Algunas personas incluso, transmiten on line, cada una de sus actividades del día. A una audiencia imaginaria. El sueño de un tirano que quiere saber todo lo que el pueblo hace, se ha hecho realidad. Hoy no es necesario que un estado policial, o fascista te obligue a exhibir tus “Papeles”, o revise tu casa. Hoy las personas acceden voluntariamente, a compartir sus datos, sus preferencias, sus deseos, y hasta los aspectos más íntimos de su vida. Sin que nadie los coaccione, abren su existencia, a la intromisión de toda clase. No es el líder supremo del estado, ni un burócrata ruso, en el supra poderoso estado soviético. Hoy son compañías como Facebook, Twitter, Amazon, Netflix, quienes “facilitan” gratuitamente sus plataformas, para que cada uno, grabe allí toda su biografía. Ellos saben más de nosotros mismos, de lo que supieron nuestros padres jamás. En este nuevo escenario, no hay siquiera un atisbo de confrontación, o rechazo. Nadie se cuestiona la condición de exposición y vigilancia permanente en que nos encontramos. En este nuevo escenario, la relación entre capital y trabajo, es más difusa. Surgen nuevas formas de trabajo, que escapan a la regulación laboral que data del siglo XX. El discurso imperante, promueve la autonomía, la independencia. Pandemia mediante, se ha instalado a millones de trabajadores (as) a trabajar desde sus propios hogares, con un control electrónico, que nunca descansa. El trabajador, en tanto sujeto que forma parte de una organización colectiva del trabajo, que es la empresa, desaparece. Queda el trabajador, externalizado, el trabajador a distancia, o tele-trabajador. Se desprende de este modo, del componente social al trabajo, y el trabajador, se vuelve un individuo más en una “línea de producción” virtual, que es infinita. Lo que algunos han visto como una conquista del individuo, en aras de su libertad, y de conseguir más tiempo para sí mismo. En la práctica ha producido todo lo contrario, con hombres y mujeres debiendo asumir la carga laboral en sus propios hogares. Sin separación alguna entre el espacio doméstico, y el laboral. Muchas veces sin los medios adecuados. En la otra cara, de la relación de las nuevas tecnologías con el trabajo. Están los grandes negocios, fraguados a propósito de estas “oportunidades”. Trabajadores que reparten comida rápida, paquetes, correspondencia, o transportan pasajeros, a lo largo y ancho de las ciudades. Ellos no son trabajadores, se les llama “asociados”, “colaboradores”. Perciben un ingreso bruto por cada entrega que realicen, no cuentan con seguridad social, ni protección de accidentes del trabajo. Todos ellos, son “sus propios dueños”, ya no deben seguir instrucciones de un jefe, son su propio jefe. Y como tales, deben “auto explotarse” si es que quieren conseguir mejores ingresos, deben (pueden) trabajar más. Con un click, se suprimen las 8 horas de trabajo, la ley de salas cunas, el derecho a descanso remunerado. Qué hablar de derechos sindicales o de negociación colectiva. En alguna elegante oficina de Nueva York o Singapur, alguien revisa los resultados de la compañía en el globo. En alguna calle de Santiago, un grupo de asociados, a la entrega de comida rápida, se enfrenta a golpes, para rescatar la motocicleta de un colega, que ha sido retenida por delincuentes. El gran conflicto ético de nuestro tiempo, no es con las nuevas tecnologías. El conocimiento puede y debe estar al servicio de todos. El internet de las cosas, la robótica y la automatización, representan importantes innovaciones, que deben servir para mejorar las condiciones de vida. El gran conflicto ético de nuestro tiempo, es con nosotros mismos. Nuestra falta de conciencia de sí mismos. El abandono absoluto, de una idea de hombre o mujer, luchando por una vida plena, porque eso se alcanza en comunidad. La nueva esclavitud, somos nosotros mismos, encerrados, esclavos del individualismo extremo, del consumo desenfrenado, que, a la vez, propicia la pérdida absoluta de libertad, por las deudas que no tienen fin. La gran esperanza de nuestro tiempo, más que en los instrumentos tecnológicos, en la técnica, y en el mito del progreso infinito, está en el interior de las personas, en la profundidad de su consciencia. El despertar interior, es lo único que puede salvar a esta generación de cibernautas, y tele-trabajadores. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 6 de diciembre de 2021.-

domingo, 28 de noviembre de 2021

EL DILEMA DE CHILE

La elección de segunda vuelta chilena, pone por primera vez en competencia directa por la presidencia de la república, a un candidato proveniente del sector más reaccionario de la derecha. Aquella que aún se aferra al recuerdo del dictador Pinochet, al que por cierto no llama de ese modo. Ese sector que sigue negando las violaciones a los derechos humanos. Aquél que reivindica a quienes cumplen, cadena perpetua, por crímenes contra la humanidad. No es el sector del nunca más, ni de la condena a los “cómplices pasivos”. Tampoco es el sector que celebró con Piñera, cuando este se alzó con sus dos triunfos. Es un sector minoritario en la política, pero también en la sociedad chilena. Por eso, resulta tan extraño, que personas moderadas, de centro derecha, respetuosas de los DDHH, y con claro compromiso democrático, hoy estén adhiriendo a una opción de ultra derecha. No se explica fácilmente, como se puede obviar, los planteamientos que atentan contra derecho de las mujeres, de las minorías sexuales, de los inmigrantes, de los trabajadores. Es cierto, que con una habilidad digna de la propaganda de Trump, se ha difundido que la elección del 19 de diciembre es “Entre el totalitarismo comunista y la democracia”. De ese modo, se busca galvanizar el voto más duro de la derecha, y a la vez, atemorizar a vastas masas de votantes moderados. Nada sería más fácil que simplificar esta ecuación, y motejar a todos los adherentes de Kast, como fascistas, nazis, o algo por el estilo. Pero eso no corresponde a la realidad. No todos sus seguidores lo son. Existen en la derecha, sectores liberales, sectores de centro, que repudian las violaciones a los DDHH, y la dictadura de Pinochet, que están por ampliar el catálogo de derechos de las personas, que están en contra del racismo, y de la discriminación de género. A esas personas de buen juicio, hay que apelar, para que detengan esta locura. No hemos llegado a este estadio en el desarrollo democrático de Chile, con una revuelta social, y un proceso constituyente mediante, para iniciar una involución histórica. La restauración conservadora, que representa el candidato Kast, representa un retroceso de 50 años en avances sociales y políticos. No es el totalitarismo comunista lo que representa la candidatura de Gabriel Boric. Lejos está de apoyar o defender a regímenes autoritarios sean del color que sean. Su candidatura es respaldada por el partido comunista de Chile, es cierto. Pero también por una vasta gama de fuerzas políticas, desde sectores liberales, la democracia cristiana, el Partido Socialista, el Partido Radical, el PPD, el Pro, y los nuevos partidos que constituyen el Frente amplio. Decenas de organizaciones de la sociedad civil, sindicatos, la Central Unitaria de Trabajadores. Agrupaciones de mujeres, de profesionales del medio ambiente, de abogados, de defensores y asesores laborales. Agrupaciones de artistas, de científicos, estudiantes. Sectores de centro, centro izquierda, e izquierda, que se identifican con un modelo de sociedad, más parecida al estado de bienestar de Dinamarca o Noruega, que a las tiranías de Europa del este, antes de la caída del muro. El dilema en Chile, el 19 de diciembre, es entre avance o retroceso, es entre desarrollo o involución histórica. Es una contienda entre quien encarna el miedo y el rencor y quien representa la esperanza. Chile no es así, no es una sociedad donde queramos estar en permanente enfrentamiento. La división a las que nos quiere arrastrar Kast, ya la vivimos, y no queremos volver a ella. No queremos sentir temor ni por ser mujer, ni por ser inmigrante, ni por ser pobre. Chile quiere y anhela paz. Esa paz sólo la garantiza quien logre unir, quien pueda pedir perdón por las injusticias históricas, y logre convocar a un nuevo camino. Quien logre convencer, de que volvamos a creer. Que volvamos a confiar, los unos en los otros. De eso se trata la decisión presidencial, no es de quien pondrá más dinero en tu bolsillo, como ramplonamente han pretendido algunos. Es sobre quien puede construir junto a nosotros, una nueva forma de relacionarnos. Una donde el respeto, comience con el trato y condiciones dignas para cada uno. Donde no importe si eres rubio o eres moreno, si eres rico o eres pobre. Una sociedad que trate a todos sus hijos e hijas como iguales, con derechos sociales universales. Donde todos contribuyamos de acuerdo a nuestras capacidades, en el financiamiento de ese moderno estado de bienestar, que nuestros hijos y nietos se merecen. Tengo amigos de distintos colores políticos. Soy un hombre maduro, que ha aprendido, lo que de joven ignoraba. Que se puede ser amigos y pensar diferente. Esa diversidad es la que le da su riqueza a nuestra sociedad. En una elección se deciden cosas muy importantes, trascendentales, pero nunca olvidemos, que seguiremos viviendo juntos en comunidad. Que nadie, ningún político, nos haga enfrentarnos, nos haga desconocer el valor esencial de cada uno de nosotros, para la sociedad. Para eso luchamos, para eso recuperamos la democracia. Para poder pensar diferente, y no temer una detención, los tormentos, o la muerte. Amigos y amigas, cada quien sabrá tomar la decisión correcta, llegado el 19 de diciembre. A nadie le quepa ninguna duda, que yo ya he tomado mi decisión. Votaré por la esperanza, y lo haré sin odio, sin violencia. Con la mirada puesta en la faz serena de mis hijos, y el corazón palpitante de tantos y tantas, que ya partieron. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 29 de noviembre de 2021.-

domingo, 21 de noviembre de 2021

SEGUNDA VUELTA: PAZ, ESTABILIDAD Y CRECIMIENTO

La sorpresa del resultado electoral de este domingo 21, sin duda muy pocos la esperaban, o esperábamos, que el candidato Boric obtuviera un par de puntos menos que el candidato Kast. Así mismo, la irrupción de un candidato con residencia en un país extranjero, y que, sin visitar Chile, desde su inscripción como candidato, lograra el tercer lugar en las elecciones. La tarea de Kast y Boric, es persuadir a los electores, que estuvieron con otras opciones, para hacer la diferencia, y vencer en un mes más. Hoy se recuerda, el fantasma de la segunda vuelta de 2017, donde el FA obtuvo 20%, y un tibio apoyo al candidato de la centro izquierda, pavimentó la llegada de Piñera. Para disipar esos temores, en esta ocasión, el partido más importante de ese sector, el PS, llamó de inmediato a votar por Boric, en segunda vuelta. Se espera que, en los próximos días, se sucedan los apoyos del resto de los partidos de ese sector. Pero mas allá de la oficialización de las adhesiones partidarias, lo que debe despejarse a la brevedad, los temas que mas preocupación generan en la ciudadanía. Una agenda que se haga cargo de los problemas de seguridad y orden público. La preocupación por la inseguridad en calles y poblaciones, el combate a la delincuencia, son temas transversales. No existan izquierdas o derechas ni para las víctimas de la delincuencia. Es preciso, dejar el atrás el prurito de cierta intelectualidad, que justifican la delincuencia, estableciendo una relación causal, con las condiciones socio económica. Una postura extendida en el progresismo, y que, a la vez, demuestra un incipiente clasismo, asociando pobreza y delincuencia, en forma directa. Un contrasentido, que debe ser corregido, con claridad y firmeza. Otra materia de honda preocupación ciudadana, es la estabilidad económica. Y más que áridos indicadores macroeconómicos, nos referimos a la estabilidad de las condiciones materiales de vida, de la masa multitudinaria de los trabajadores. La posibilidad de conservar el empleo, que por modestos que sean los salarios, son los que permiten la subsistencia. Un gobierno que aspira a garantizar derechos sociales, debe partir por garantizar lo que hoy se tiene. Es fundamental, ser claros y explícitos, para generar condiciones para el libre desarrollo de la actividad económica. El cuidado y promoción del empleo, es lo que proporciona una esencial estabilidad, al ciudadano de a pie. Así mismo, generar nexos activos, con los actores económicos, para compatibilizar la implementación de las nuevas normas regulatorias, con mejores condiciones para el desarrollo de los negocios } Sin lugar a dudas, existen temas incomodos para la izquierda, como el rechazo a la violencia en la araucanía, y la decisión de perseguir y detener a los grupos para militares, que operan allí. Existe una trampa en el discurso progresista, que le impide rescatar para la izquierda, temas tan esenciales para el desarrollo social, como es el de contar con seguridad interior, y con paz, como elemento articulador de las relaciones sociales. Le corresponderá a Gabriel Boric, ser capaz de encarnar, un proyecto social y político, que, a la vez de perseguir transformaciones profundas de la sociedad, sea capaz de garantizar, las condiciones adecuadas para el pleno y total desarrollo de las personas. La paz y la libertad, son patrimonio de los demócratas del mundo, de quienes, como el progresismo chileno, combatió y derrotó a una dictadura. Esa es la gran diferencia entre el proyecto de cambio que encarna Gabriel Boric, que pone en el centro al ser humano, con inclusión, con integración de las minorías y diversidades sociales y culturales. Por otra parte, la alternativa de Kast, ofrece una restauración conservadora, reducción de la protección o de los derechos consagrados a la mujer. Reducción de la capacidad reguladora del estado, reducción de servicios públicos, y reposición de un enfoque paternalista, y discriminador de la mujer, en la sociedad. La centro izquierda, se ha visto mermada ostensiblemente en las elecciones parlamentarias, ha crecido el FA y el PC, también ha aumentado su representación la derecha, y ha irrumpido un nuevo actor, el denominado “Partido de la gente”, creado por el candidato Parisi. En la cámara de diputados la actual oposición obtuvo la mayoría, disgregada en distintos pactos y partidos. Sin embargo, el partido de la gente, está en condiciones de equilibrar en un sentido u otro, la mayoría existente. Se abre una posibilidad de generar una plataforma mínima, que permita confluir a las fuerzas políticas de izquierda y centro izquierda. En esa plataforma, la base de sustento, es un compromiso por traer la paz y la seguridad a los hogares y a las ciudades de Chile. Combate a la delincuencia, al narco tráfico. Como requisito previo, a la construcción de una sociedad de derechos. El crecimiento económico, es imprescindible, para generar las condiciones sociales que el proyecto político ofrece. El desafío del progresismo es hacer viable, una opción de transformación social profunda, que sea mas atractiva para las personas comunes y silvestres, que la opción conservadora del candidato Kast. Es en esa candidatura de derecha radical, donde se albergan las mayores amenazas a las libertades individuales. A los derechos de las mujeres. A la paz social, con la agudización de los conflictos, y la militarización. Es una involución en el ámbito medioambiental, en el ámbito energético, en el plano económico, y en el ámbito laboral. El rechazo a la opción de restauración conservadora, que representa Kast, pasa además por algo fundamental, su negación permanente de las violaciones a los DDHH. Ese sólo aspecto, representa una materia intransable para los demócratas chilenos, y no existe posibilidad alguna de relativizar su importancia. Con una centro izquierda dispersa en sinnúmero de opciones presidenciales, Gabriel Boric, deberá probar su liderazgo, y la capacidad de forjar una unidad capaz de superar la opción que representa al gobierno de Piñera, y su continuidad. La gobernabilidad que Chile requiere, se juega en realizar los cambios sociales y políticos con gradualidad, pero en forma continua. De este modo se facilita la transformación de la estructura productiva, para avanzar hacia el pleno desarrollo con estabilidad. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, Lunes 22 de noviembre de 2021.-

domingo, 14 de noviembre de 2021

LA ORDEN DEL DÍA: GANAR EL 21

En la semana que pasó, como estaba previsto, se produjeron las votaciones de importantes materias en el parlamento. Luego de una titánica jornada en la cámara de diputados, se aprobó la acusación constitucional en contra del presidente Piñera. La sesión incluyó una exposición del diputado Naranjo, que se extendió por más de 14 horas continuas. Con la declarada intención de aguardar la llegada del diputado Jackson, el cual terminaba en la medianoche su cuarentena, como contacto estrecho de Covid positivo. En medio de los reclamos del oficialismo, por considerarlo un show, la oposición demostró como pocas veces, unidad férrea. La votación se podría haber hecho en forma telemática, pero la derecha se opuso. El oficialismo esperaba que se votase en ausencia de Jackson, asegurando el rechazo de la acusación. Pero nadie contaba con Naranjo. Al comienzo nadie se lo tomaba muy en serio, pero se inició la exposición, y empezaron a leerse los argumentos jurídicos, y los fundamentos de hecho, de la misma. Nada más y nada menos que mil trescientas páginas. Esa noche, hubo quienes se quedaron viendo la transmisión del canal de la cámara. Se vio a quienes antes, abundaron en críticas a la vieja concertación, a las figuras políticas de los 30 años, ahora elogiando, constatando con sorpresa, que hay vida aún en el añoso tronco socialista. Jaime Naranjo, con su esfuerzo de esa noche, se ganó el respeto de una generación de políticos jóvenes, los que llegaron hace no más de 10 años, a transformar Chile. Fue bastante emotivo, cuando llegó el diputado Jackson, y se fundió en un abrazo con el diputado Naranjo. Eran los cuadros históricos de los partidos tradicionales, tendiendo una mano, a las generaciones más jóvenes, a los políticos del relevo, los que recibirán la posta. La actividad política, muchas veces se ve como un lugar frío, lleno de cálculos pequeños, de pasadas de cuenta, de triquiñuelas. Muy pocos de los actuales parlamentarios, habían tenido oportunidad de experimentar, algo parecido a la épica en el parlamento. De ahí se explica, el entusiasmo y emoción, que produjo la maratónica sesión en que se dio lectura, y luego se aprobó la acusación constitucional. Hasta ahí la oposición sacaba cuentas alegres sobre su capacidad de coordinación, y la unidad que demostró. La aprobación del proyecto de cuarto retiro en la cámara también fue motivo de la misma alegría opositora. Sin embargo, en el senado, pese a haberse sumado dos votos de senadores de derecha, Ossandon y Sabat. El proyecto fue rechazado por el voto de rechazo de la senadora Goic. Pese a las gestiones desplegadas por la candidata DC Yasna Provoste, la senadora por Magallanes mantuvo su rechazo, por lo que el proyecto pasará a comisión mixta. Y por efecto del estrecho calendario, y también debido a maniobras dilatorias del presidente oficialista de la cámara, es altamente improbable que llegue a discutirse y menos aprobarse, antes de la primera vuelta presidencial. El resultado de la votación del cuarto retiro en el senado, notifica a la oposición, que no contará con todos los votos de ese sector político, en futuras votaciones. Desde ya, se anticipa una situación similar ante la acusación constitucional, que deberá ver el Senado actuando como jurado. Asimismo, cuando se vea nuevamente el proyecto del cuarto retiro. De todos modos, el gobierno pudo sacar cuentas alegres, ya que, con votos de oposición incluidos, se aprobó la extensión por 15 días del estado de emergencia en dos provincias de la región del Biobío y en la Araucanía. Como ven, la actividad legislativa no se detiene, pero las campañas electorales tampoco. Ya quedan escasos días para las elecciones presidenciales, parlamentarias y de consejeros regionales. Cual mas cual menos, todas las candidaturas han hecho un despliegue en los medios, y en las calles, y han visibilizado las más notorias de sus propuestas. Algunos ya trataron de sacar ventaja de los errores forzados y no forzados. Pasó el asunto del covid de Gabriel, de los errores en las cifras de Gabriel. Y esta semana se sumó, una declaración inexplicable, atribuida al partido comunista, en que felicitaba la elección por enésima vez, del tirano Ortega en Nicaragua. Allá corrieron todos a pedir explicaciones al candidato Boric, que si estaba o no por los DDHH. Afortunadamente, se determinó que la mentada declaración no representaba el sentir del centenario partido, y finalmente nadie se hizo cargo de su origen. Lo más notable de este episodio, es que la totalidad de las ex dirigentes estudiantiles del PC, que hoy están en el parlamento, e incluso las gloriosas Juventudes Comunistas, señalaron su rechazo al régimen de Ortega. Es un hecho inédito, que da esperanzas de la llegada de una renovación del liderazgo, una incipiente primavera, que le haría muy bien a la izquierda chilena. Desde ya, las carreras para liquidar ipso facto la candidatura de Boric, tuvieron un resultado inverso, pues dando una señal de autoridad, Boric, expresó la línea que seguirán las relaciones exteriores de Chile. Las que el propio PC, señaló que le correspondía exclusivamente al Presidente de la república conducir. En el otro lado de la vereda, unas cuantas millas hacia la extrema derecha y mas allá. El candidato Kast, entrevistado por medios internacionales, hace una apasionada defensa de la dictadura fascista de Pinochet, negando la existencia de opositores detenidos, e incluso destacando la existencia de elecciones libres. De pronto, el verdadero pensamiento político de este candidato presidencial, se puso en evidencia. No más palabras de buena crianza, y llamados al sentido común, es la bota y el fúsil, ofrecidos sin más ni más. La relativización de los crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura chilena, ha provocado una ola de indignación, absolutamente transversal. Hasta el propio candidato oficialista Sebastián Sichel, denunció las falsedades y atrocidades de Kast. Y advirtió que la elección puede transformarse en un nuevo plebiscito sobre la dictadura. Quienes estamos por la paz, por la libertad y la democracia no podemos callar ante los cantos de sirena del fascismo. Esta lucha nos convoca y concierne a la sociedad toda. A votar el 21 de noviembre, a derrotar a los secuaces de Pinochet. Ernesto Sepúlveda Punta Arenas, lunes 15 de noviembre de 2021.-

domingo, 7 de noviembre de 2021

NO TODO ES CANCHA

Esta semana vimos otro episodio, de una larga lista de malos tratos, zancadillas, entre las candidaturas presidenciales. Fue a propósito del contagio de Covid del candidato Boric. Se repitieron de manera insistente cuñas, en todos los medios, para cuestionar, la fecha en que tuvo sus primeros síntomas, sobre la fecha en que fue diagnosticado. Llegándose incluso a la publicación de una supuesta ficha médica, de dudoso origen. En un contrasentido difícil de explicar, la candidata de la DC, que en su franja electoral dedicó un espacio muy hermoso, al recuerdo de las personas afectadas por la pandemia. Aparecía ahora, fustigando a su principal contendor de la oposición, por las múltiples obligaciones que iba a tener que posponer por la entrada en cuarentena. En resumen, una serie de críticas públicas a un candidato, que como todo paciente Covid, debía asumir su condición y preocuparse de su cuidado y atención. Paradójicamente el primero que envió un saludo de ánimo, y pronta recuperación al paciente Boric, fue su adversario Sebastián Sichel. Da la impresión, a medida que los días pasan, y la elección se acerca, de cierto nerviosismo, cierta tensión que afecta a unas candidaturas más que a otras. Llama la atención en la candidatura de Provoste, la performance Covid. No es su estilo, no es la forma en que ella se comporta en política. Ella es una excelente candidata y mejor persona. Sólo se explica la dureza de las expresiones, la aparente falta de empatía, en el perfilamiento recomendado por su equipo de asesores. Una mala asesoría sin lugar a dudas. Es un hecho de la causa, que, para la segunda vuelta, los votantes opositores apoyarán la candidatura de izquierda o centro izquierda, que llegue a esa instancia. La tarea política de hoy es allanar los caminos, que permitan acordar una plataforma mínima común. No es tiempo de gustos personales, ni de fuegos de artificio. La tarea del próximo gobierno será titánica, y no bastará con una feble mayoría parlamentaria. De hecho, el escenario más probable, es un parlamento disgregado en varias fuerzas políticas, similar a la constituyente. Con mayoría progresista, pero disperso en distintos pactos políticos. Tiendo a pensar, que la interrupción de la campaña presencial, producida por la cuarentena de las candidaturas, va a producir esta semana, un mejor clima de cara a la votación del día 21. Es lo más recomendable, lo más sano, y lo mejor para Chile, que las candidaturas contribuyan a construir un clima, de concordia, de buena convivencia, de amistad cívica. Cual más, cual menos, estamos hasta la coronilla, de noticias falsas, de golpes de efecto por denuncias de pacotilla, que duran o que alcanzan a verse en televisión. A estas alturas es muy difícil que, viendo una franja política, los electores cambien de opinión. Las alternativas ya han sido expuestas, y en los días que restan, deberán afinarse detalles de las propuestas menos conocidas, o de las ideas que generan más controversia. Aunque las empresas encuestadoras, se han dado un festín anunciando prematuramente ganadores. Lo cierto es que estas, han estado muy lejos de la realidad en comicios recientes. Como en la primaria, donde daban por ganadores a Lavín y Jadue. O las encuestas que daban a la derecha prácticamente empatando en el plebiscito y elección de constituyentes. Mientras no se legisle al respecto, las empresas encuestadoras, seguirán vendiendo su producto, como un insumo publicitario más. En paralelo al escenario electoral, se deciden esta semana, materias de suma importancia en el parlamento. La acusación constitucional contra el presidente Piñera, que si bien en la comisión respectiva, fue rechazada gracias a la abstención del diputado Auth (ex PPD). Se presume que podría ser aprobada en su votación en sala. Con lo que se daría paso al senado que decidiría, en definitiva. Es improbable, en todo caso, que, en la cámara alta, la acusación reúna los votos suficientes, por lo que el presidente Piñera librarse, y terminar su mandato normalmente. Por otro lado, se votará en el senado en general el proyecto del cuarto retiro de fondos previsionales. De destino hasta ahora incierto, debido al anuncio de la senadora Goic, y senador Montes, de que están por el rechazo. Otra materia controversial, será la votación para autorizar o no, al presidente a extender el estado de emergencia, en cuatro provincias de la región del Biobío y en la Araucanía. Sin lugar a dudas, estas importantes materias que decidirá el congreso, deberán contar también con la opinión de las candidaturas presidenciales. En torno a definiciones como esas, se toman decisiones en los hogares chilenos. La seguridad pública, es un tema que divide aguas en la política chilena. Aún existe un complejo de cierta izquierda, cuando se habla de orden y seguridad, temas que se asocian al pasado autoritario, en la dictadura fascista. Hoy resulta del todo evidente, que la sociedad democrática debe contar con medios legítimos, para defender la convivencia pacífica y la vida en comunidad. Este es el único escenario donde pueden ejercerse a plenitud los derechos esenciales de la persona humana, que el ordenamiento reconoce y garantiza. Existe un abismo de distancia, entre quienes propugnamos un estado social y democrático de derecho, que brinde el espacio donde cada persona, pueda desarrollarse en plenitud, y quienes niegan o cuestionan, la vigencia de este catálogo de derechos fundamentales. En este plano no existe posibilidad de confundirse. Y los electores deben estar alertas, a quienes proponen un orden, basado en restricciones a las libertades personales. No queremos en Chile autócratas de ningún color político. Queremos vivir y desarrollarnos en libertad, sin vigilancia ni de gobiernos ni de partidos únicos. Sin tutela de líderes iluminados ni aparatos militares. Cuando la elección está cada vez más cerca, y pronto saldrán de su cuarentena las candidaturas presidenciales, el ojo bien abierto del elector, estará puesto en las definiciones fundamentales. Se alzará como vencedor, quien logre transmitir al electorado un mensaje creíble, auténtico, que infunda confianza, que de esperanzas de solución a los múltiples problemas que nos aquejan. Esperemos que todos hagan su mejor esfuerzo, para que podamos votar debidamente informados. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 8 de noviembre de 2021.-

domingo, 31 de octubre de 2021

DEL PLEBISCITO DEL 88' AL DEL 2020

Nos acercamos cada día más a las elecciones presidenciales, y el clima electoral en Chile, está crispado, y polarizándose cada día más. El tono de los debates, y de las intervenciones de las candidaturas no ha ayudado, por las recriminaciones, acusaciones, o golpes de efecto, que quienes compiten, se brindan cada tanto. En este escenario, los millones de ciudadanos de a pie, que son quienes decidirán esta elección, necesitan certezas, necesitan certidumbres. Escenarios de polarización similares a este los hemos vivido antes en Chile. Guardando las evidentes proporciones, puesto que vivíamos una dictadura de la que nos queríamos liberar. El plebiscito de 1988, fue la oportunidad en que Chile, se miró y tomó una decisión que cambiaría nuestra historia. La biblioteca del congreso nacional, lo recuerda así: “ De un universo electoral total de 7.236.241 votos escrutados, válidamente emitidos, el Sí obtuvo 3.111.875 sufragios, equivalentes al 43% de los votos, en tanto la opción No obtuvo 3.959.495 votos, equivalentes al 54,70% de los votos válidamente emitidos.” (BCN, 2021) En palabras simples, un país fraccionado en dos. Aunque el triunfo de quienes estuvimos por la democracia y la libertad, fue claro, no deja de inquietar el alto porcentaje de apoyo, que obtuvo el dictador Pinochet. Un 43% de personas que deseaban que la dictadura cívico militar continuara hasta 1997. Teniendo ese antecedente en la memoria, no resulta extraño, que subsista en Chile, un sector que aun reivindique las ideas que sostuvo el régimen autoritario. No obstante, y para tranquilidad de la sociedad toda, esas ideas de derecha extrema, no han encontrado hoy el mismo apoyo en las urnas. Lo que constituye un giro completo en el panorama político, ha sido el resultado del plebiscito de 25 de octubre de 2020. En esta ocasión, según datos del SERVEL, “Participó el 50,5% del padrón electoral. De un total de 14.855.719 inscritos, concurrieron 7.511.523 electores. Los resultados fueron que el 78,27% de las preferencias fue para la opción Apruebo, mientras que el 21,73% por ciento fue para la opción Rechazo. En tanto, respecto del órgano que redactará la nueva Constitución, la Convención Constitucional obtuvo un 78,99% y la Convención Constitucional Mixta un 21,01%. “ (SERVEL, 2021) La participación en este plebiscito, fue la mayor en términos de número de votos absolutos de toda nuestra historia. Superando incluso al plebiscito por el que nos liberamos de la dictadura en 1988. Pero lo más notable de todo, es que los electores chilenos, la base de nuestra democracia, se encuentra en una inmensa mayoría de acuerdo en lo sustancial. Un 80% quiere cambiar la constitución de Pinochet, y un 80% decidió que fuera a través de una convención constituyente. El sector que se aferra a las leyes y símbolos del pasado autoritario constituyen una minoría, incapaz de imponer sus ideas, como sí lo hicieron en el pasado. Una vez más viviremos una presidencial donde se opta entre los continuadores del modelo, y quienes quieren realizar los cambios que Chile necesita. El año 1989, un año después del plebiscito, enfrentamos también una presidencial, donde el dictador tuvo su candidato “civil”, el ex ministro de Hacienda Hernán Büchi, el generalísimo de su campaña fue Sebastián Piñera. La oposición unida, derrotó abrumadoramente al candidato del continuismo. Hoy igual como ayer, Chile ya decidió. Por más encuestas financiadas por el gobierno, se saquen, el candidato, que encarna las ideas, prejuicios y privilegios del pasado autoritario, será derrotado por una mayoría amplia y sustantiva. A no perder la calma ni el ánimo, y permanecer alertas. Ernesto Sepúlveda Citas: BCN, B. B. (31 de octubre de 2021). www.bcn.cl. Obtenido de https://www.bcn.cl/historiapolitica/elecciones/detalle_eleccion?handle=10221.1/63196&periodo=1973-1990 SERVEL. (31 de octubre de 2021). www.servel.cl. Obtenido de https://historico.servel.cl/SitioHistorico/index1989_pres.htm SERVEL. (31 de octubre de 2021). www.servel.cl. Obtenido de https://oficial.servel.cl/las-conclusiones-en-participacion-electoral-que-arrojo- el-plebiscito-2020/

domingo, 24 de octubre de 2021

ESTAR PREPARADOS

Queda menos de un mes para la elección presidencial. Las candidaturas han hecho su despliegue, tratando de convencer a un electorado cada vez más desencantado. La oferta electoral parece no estar dando cuenta, de las expectativas de muchos. La más clara muestra de ello, es el derrumbe del candidato favorito de Piñera y del gran empresariado. De nada ha servido a Sichel el apoyo del presidente, del gabinete y de los principales donantes de dinero. No convence, parece que estuviera actuando, en el puesto de otro. Que los estudios de opinión sitúen al candidato de ultra derecha José Kast, con posibilidades de acceder a la segunda vuelta, demuestra el nivel de desorientación de los electores. Aún hoy día más del 30% no sabe por quién votará. No ha contribuido a disipar las dudas, el desempeño de las candidaturas en las entrevistas y debates. En el caso de quien todos mencionan como el favorito, Gabriel Boric. La crítica ha sido brutal, por su nulo manejo de las cifras de su programa. Errores no forzados, que se han sucedido día tras día, lo han llevado a declarar: “Puedo equivocarme en los números, pero les puedo asegurar que tengo limpias las manos”. Es cierto de que las candidaturas presidenciales, no están obligadas a rendir examen en ciencias exactas, para acceder a La Moneda. Problemas similares tuvo el ex presidente Aylwin, y a la querida y recordada presidenta Bachelet, tampoco se le daban mucho los números. Sin embargo, la tarea que se nos viene por delante en materia social y económica es tan fuerte, que el nivel de exigencia ahora es superior. Y ningún elector se sentirá seguro de su candidato, si este desconoce el costo de las medidas que propone en su programa. Simplemente, aquí hay un escollo que el candidato Boric, deberá salvar. Pero también las otras candidaturas. No es aceptable, que se hagan discursos llenos de vaguedades, y declaraciones de intenciones. A estas alturas, tampoco son aceptables las listas de supermercado, de supuestos beneficios que se otorgarían si fulana o merengano, resultan electos. Tratar a los ciudadanos, como si estuvieran esperando una dádiva, es lejos lo más clasista que se puede hacer. La situación social y económica actual, obliga a tomar decisiones hoy. Es urgente que se acuerden y aprueben medidas inmediatas, que vayan en ayuda de hogares y mypes. Eso no podrá esperar la elección de noviembre, ni mucho menos, que las nuevas autoridades asuman en marzo de 2022. La presión social no ha mermado, y no tiene sentido esperar el cambio de gobierno para buscar soluciones ahora. Por lo pronto el retorno del vandalismo, a las calles, la destrucción del mobiliario urbano, y el saqueo de comercios, es una realidad insoslayable. Ningún gobierno sea del color que sea, puede consentir en la pérdida del orden público. La izquierda debe alejarse del prurito adolescente, de que la seguridad pública, es un asunto de la derecha. Eso es tan absurdo, como pensar que se puede construir un estado de bienestar, sin crecimiento económico. Estas son dos materias pendientes, y sobre las cuales orbitará la decisión de los electores. Si realmente tiene posibilidades de ser presidente un candidato de la izquierda chilena, debe entregar claridad y certeza a las personas, de que se conservará el orden y la paz, que permiten a cada uno llevar adelante sus asuntos cotidianos. Es un error garrafal, permitir que la ultra derecha hegemonice el discurso sobre la paz y seguridad públicas. Y no me refiero a las declaraciones al voleo, donde se condena la violencia. Me refiero a compromisos concretos. Por ejemplo, con la comunidad universitaria, y la ciudad de Concepción, que por segunda vez ve atacada su centenaria sede. Destruir una sede universitaria, o una escuela, nada tiene que ver con reivindicaciones sociales del pueblo de Chile. Aunque una elite radicalizada pretenda otra cosa, esas acciones deben ser perseguidas y sancionadas, sea que gobierne Piñera, o un gobernante de izquierda. Son acciones criminales, que no se condicen con un estándar mínimo de convivencia democrática. En una elección, que tan pocas certezas, está ofreciendo a los ciudadanos, se va a inclinar la balanza por definiciones claras, en aspectos como el mencionado. Pero, debemos estar prevenidos, tanto del ofertón populista, como del discurso autoritario, que ofrece resolver todo por nosotros, sin nuestra participación. Cuando cunde la desesperanza, y cuando se anida el resentimiento en la convivencia social, es cuando la democracia corre peligro. De cada uno de nosotros depende el tomar las decisiones correctas, el hacer sentir nuestra voz. Pero depende de las candidaturas presidenciales, dar el mejor esfuerzo, para con honestidad y transparencia, dar a conocer sus programas de gobierno. No bastan las buenas intenciones, ni la buena onda. Se puede tener eso, y luego un pésimo gobierno. Y Chile no resiste otro pésimo gobierno. La candidatura que pretenda realmente llegar a La Moneda y dirigir Chile, debe prepararse mejor, hacer el esfuerzo, dejarlo todo, los electores se darán cuenta. Nunca hay que olvidar, que, en el pasado, sobre la desesperanza y el resentimiento, se anidó una serpiente, que, con su veneno, corrompió a una nación culta, y amenazó con destruir el mundo entero. Sucedió en Alemania, en elecciones democráticas, con una campaña de mentiras, y difundiendo una ideología racista, llegó al poder Adolf Hitler y el partido nazi. Hasta el día de hoy, resulta increíble, como tantas personas pudieron ser engañadas, y como tantas otras se unieron a la fiesta sangrienta con entusiasmo. A Dios gracias, no estamos en Chile ad portas, de algo similar. Pero valga el recuerdo, para advertir a los incautos. Bajo un barniz levemente democrático, se puede esconder el mismo flagelo que fracturó un continente. Ernesto Sepúlveda Punta Arenas, lunes 25 de octubre de 2021.-

domingo, 17 de octubre de 2021

se avanza

Esta semana se cumplen dos años desde el estallido social, del 18 de octubre de 2019. Desde esa fecha hasta ahora, se efectuó el plebiscito que aprobó confeccionar una nueva constitución. Se eligió a los integrantes de la convención constituyente. Se efectuaron por primera vez elecciones de gobernador regional. A la fecha tras los primeros tres meses de funcionamiento, la convención confeccionó y aprobó su reglamento de funcionamiento. Y se dispone a iniciar la tarea de fondo, que será redactar el contenido del texto constitucional de Chile. En lo que va de transcurrido del año, se efectuaron además las primarias presidenciales de la alianza de izquierda y del pacto de gobierno, de las cuales emergieron los candidatos Gabriel Boric, y Sebastián Sichel respectivamente. Y se efectuó la consulta ciudadana de la centro izquierda, donde se impuso la candidata DC Yasna Provoste. Sin lugar a dudas un año electoral. Y aun resta la votación principal, que se efectuará el 21 de noviembre, primera vuelta de las elecciones presidenciales, elección parlamentaria y de consejeros regionales. En esta elección se enfrentan 7 candidatos, y según todas las encuestas quienes van en las primeras posiciones son Gabriel Boric, Sebastián Sichel, José Kast, Yasna Provoste. Los desempeños de los candidatos en los debates, ha sido disímil, destacando mas que el despliegue de ideas y propuestas, las imputaciones que se han hecho unos a otros. Acusaciones de financiamiento irregular de campaña, que se imputó a Sichel. Tener inversiones en paraísos fiscales, que se imputó a Kast. Y la existencia de irregularidades en Junaeb atribuidas al marido de Provoste. Hasta ahora las candidaturas han tenido un despliegue confrontacional en los debates de TV, y sólo ha existido un trato relativamente deferente entre Boric y Provoste, y entre Boric y Meo. Hasta hace una semana todas las mediciones daban por ganador en primera vuelta a Gabriel Boric. La encuesta Pulso ciudadano, ante la pregunta ¿Quién crees tú que ganará las elecciones presidenciales en noviembre?, responden: Boric 28,9%, Kast 15,2%, Provoste 11,9%, Sichel 7,6%, Parisi 3,9%, Meo 1,2%, Artés 1%, en tanto responde no sabe 30,3%. Se infiere de estos datos, que Gabriel Boric mantiene su posición de liderazgo respecto de mediciones anteriores. Se aprecia el crecimiento del candidato de ultraderecha José Kast, quien capitaliza la opinión crítica que incluso la derecha tiene del gobierno de Piñera. Sichel paga por su pésimo despliegue de campaña, y por el impacta de las denuncias. En tanto a la candidata Provoste, no le alcanza para asegurar un segundo lugar en noviembre, y su paso a segunda vuelta. Restando un mes para la votación, Según la encuesta Pulso Ciudadano, los aspectos que mayor inquietud provocan en la ciudadanía son: salud 27%, delincuencia 26%, inmigración 23%. Corrupción 21%, desigualdad 20%, y pensiones 20%. Resulta fundamental, la labor de difusión que efectúen los distintos comandos, para un voto debidamente informado. Ni la revisión de los tratados internacionales, ni el nombramiento de trabajadores en los directorios de las empresas, parecen ser propuestas nacidas de la ciudadanía. Por lo mismo han sido criticadas transversalmente. El rol del Banco Central, si bien en ciertos sectores de izquierda mas radical, ha sido criticado, el candidato Boric ha manifestado que se respetará su autonomía, y su rol en el control de la inflación. En el plan económico es donde más críticas se han deslizado al candidato que va a la delantera. Y es natural que sea así. Las condiciones a partir de marzo de 2022, van a ser complejas. Aún no se recuperan los empleos perdidos en la pandemia. Si bien la economía está creciendo, el Banco Central ha advertido del recalentamiento, producido por el exceso de gasto privado, derivado de los retiros de las AFP y los subsidios estatales. No por nada en la última reunión de política monetaria, dispuso la mayor alza en 20 años. La tasa subió a 2,72%, lo que va a producir un incremento en el costo de los créditos. Ya el alza de la UF, ha producido un encarecimiento de dividendos hipotecarios. Asimismo, las tasas de los créditos de vivienda han aumentado, y se ha reducido el plazo de otorgamiento. Al día de hoy, no se ofrecen ya créditos a 30 años. Las definiciones que efectúan los candidatos o sus representantes en materia económica, producen consecuencias inmediatas en la percepción de mayor o menor riesgo para las inversiones. Es un tema sensible, que no puede quedar entregado a personas que sólo repiten consignas, o recitan fragmentos de un programa de gobierno. Incurrir en errores en esta materia, es algo que debe corregirse con prontitud. Asimismo, es esperable que cese el festival de ofertones. Hasta la candidata DC en una de sus intervenciones, inicia ofreciendo el pago de la deuda histórica de los profesores. Un ofrecimiento insólito, considerando que, en 20 años de gobierno de la Concertación, nunca el ejecutivo planteó tal iniciativa. Tampoco parece muy serio, plantearse programas de gobierno que cuestan más de 5,0 puntos del PIB, no incluyendo medidas pro inversión. Es como estar viendo una mala película de la guerra fría. El voluntarismo que pretende que por el sólo hecho de que se suban los impuestos a los mas ricos, se va a poder financiar todo. El mismo que pretende. que sólo aumentando el gasto público se va a generar crecimiento económico. El próximo gobierno va a enfrentar un escenario de fragmentación en el parlamento, que le va a impedir imponer una agenda legislativa. Quien quiera que gane la primera vuelta, va a requerir del apoyo de otros sectores para imponerse en segunda vuelta. El candidato Gabriel Boric, quien es el que aparece con mas posibilidades, va a requerir del apoyo de la centro izquierda. Eso va a requerir desplegar mucha habilidad de negociación. Por un lado, para contener los intentos de un sector más conservador del PC, que pretende hegemonizar el proyecto político. Y por otro, las exigencias que hará la centro izquierda, para tranquilizar a su electorado, y a los actores económicos y sociales, que respaldan los cambios con moderación. La llave de La Moneda la tiene, quien sepa conciliar posiciones e intereses enfrentados, logrando sintetizar en una propuesta que convoque y represente a la mayoría de Chile. Ernesto Sepúlveda Tornero

domingo, 10 de octubre de 2021

DOMINGA EN LA MONEDA

En Chile se aburre el que quiere. Semana a semana, se van sucediendo hechos que impactan, que emocionan, o que sulfuran, que enojan tanto que parecen quemar en las entrañas. Es el caso de lo que se conoció sobre el presidente Piñera y su familia, en los denominados “Pandora Papers”. Investigación, efectuada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, en el que participan los sitios chilenos CIPER y LaBot, junto a medios y más de 600 periodistas de todo el mundo. Que indaga en documentos filtrados, de paraísos fiscales. En lo que respecta a Chile, se revelan detalles del multimillonario negocio, que selló Sebastián Piñera y su socio Délano, para la venta de la minera Dominga. El contrato en inglés, contenía una cláusula, que sometía al cumplimiento de una condición, el tercer pago del precio de venta. Délano pagaría a Piñera esa suma, si el lugar donde se emplaza la mina, no era declarado como sitio de protección ambiental. El proyecto Dominga, se emplaza en un ambiente de gran riqueza, por la biodiversidad existente en el medio marino. Se ha cuestionado mundialmente, el daño que podría causar, a un espacio de delicado equilibrio. Según informa Ciper Chile “Originalmente, la familia Piñera Morel fue la mayor accionista del proyecto Dominga. Junto a Carlos Alberto Délano sumaban más del 56% de la propiedad, hasta que en diciembre de 2010 este último compró la participación de todos los otros socios en US$152 millones. Parte de la operación se llevó a cabo en las Islas Vírgenes Británicas, donde se firmó un contrato que establecía un pago en tres cuotas. La última dependía de que no hubiera cambios regulatorios que obstaculizaran la instalación de la mina y su puerto. El detalle es que dichos cambios dependían de decisiones del gobierno de Sebastián Piñera. Los inversionistas, incluyendo la familia presidencial, habrían obtenido una ganancia de 1.000% en 18 meses. “ En el congreso la oposición unida, ha anunciado la presentación de una acusación constitucional en contra del presidente Piñera, para iniciar un juicio político, que debe concluir con un pronunciamiento del senado, en calidad de jurado. Aunque es improbable que, en el senado, la oposición logre su aprobación. Se requiere un quórum de 2/3, es decir 29 senadores, y la oposición contaría con 24 senadores. El hecho político es que el congreso nacional, iniciará la discusión de una acusación constitucional contra el presidente Piñera, con miras a que el senado apruebe su destitución. Se trata de un hecho político de proporciones. Que, dentro de esta misma semana, ha sido abonado, o reforzado, por la decisión de la fiscalía nacional, de iniciar una investigación penal en contra del presidente Piñera y su familia. Para determinar la eventual existencia del delito de cohecho, soborno y eventuales delitos tributarios. La fiscalía nacional ha sido enfática, en aclarar que no existe cosa juzgada al respecto. Lo anterior debido a que la causa sobreseída, del caso de Pesquera Exalmar, no guarda relación con Dominga, ni se tuvo a la vista el contrato de compraventa. Siempre se ha destacado la habilidad de Piñera como inversionista, el haber hecho una fortuna multimillonaria, en base a la especulación financiera. A la par de esa historia, siempre ha existido una historia paralela, que habla de irregularidades, incluso de eventuales delitos. Los enumera en su última columna en “La Tercera”, el periodista Daniel Matamala, estos serían: Quiebra del Banco de Talca (1982), Empresas zombis para eludir impuestos (1992 a 2004), Caso Chispas (1997), venta de acciones de Enersis a Endesa España, en condiciones privilegiadas, siendo senador de la república. Tanto en la campaña presidencial de 2009 como en la de 2017, todo este historial fue ampliamente difundido, fue material para los debates presidenciales. Sin embargo, Piñera se impuso en las urnas. Es una constatación singular, ¿será acaso que al ciudadano común y silvestre no le importan estos temas?, quien puede decir que no escuchó decir alguna vez: “Él no va a robar porque ya es rico, y no tiene necesidad”. Nociones como esa, hacen dudar de la racionalidad de las decisiones electorales. En parte explican cierta credulidad, de la que se benefició el candidato “Que no declararon reo por lindo”. Pero ni aún esa aparente habilidad para sortear acusaciones o denuncias, le servirá a Piñera esta vez. La investigación penal abre un escenario que no va a concluir con el mandato presidencial. El proceso se va a prolongar después de su salida de La Moneda, y pondrá la lápida al fin de su segundo mandato. En tanto, la acusación constitucional, pone en el tapete de la discusión pública, e instala en el debate presidencial, los cuestionados negocios del inversionista-presidente. Su sector político, nominalmente le apoya por medio de los presidentes de partido. Pero los parlamentarios y consejeros regionales que van a re elección, y su candidato presidencial, han cortado amarras, y rechazan la defensa corporativa. Llegó el momento de que se aclaren las cosas, que la verdad se imponga. No hay otra forma de entendimiento social y político en Chile, que no sea sobre esa base. Nuestro país necesita estabilidad, reglas claras para todos, partiendo por los gobernantes. Es nuestra única defensa contra el populismo y la anarquía. De esta situación amarga que vivimos como república, nadie sale beneficiado. El prestigio de la institución presidencial, la honra de nuestra nación, es imprescindible para cualquiera de los candidatos que se alce con el triunfo en noviembre. Recuperar ese prestigio, y salvar esa honra, es tarea de todos los ciudadanos, más allá de colores o posiciones políticas. Ernesto Sepúlveda Punta Arenas, lunes 11 de octubre de 2021.-

domingo, 3 de octubre de 2021

EL JUICIO

El film “A time to kill”, año 1996, dirigida por Joel Schumacher, que se traduce al español como “Tiempo de matar”, es película ambientada en el pueblo de Canton, a fines de la década de los 90’ del siglo pasado. Canton, es sede del condado de Madison, en el estado de Misisipi. Al año 2000, contaba con cerca de 12 mil habitantes, de los cuales más de 9 mil se reconocían de raza afroamericana, en tanto sólo 2.500 personas se reconocían de raza blanca. Un 34,8% de la población se encontraba bajo el umbral nacional de pobreza. La trama muestra al protagonista como un joven abogado, Jake Brigance, interpretado por Mathew Mc Conaughey, quien ha heredado el estudio de un famoso abogado, ya retirado, interpretado por Donald Sutherland. La escena que gatilla el nudo central de la película, muestra como dos hombres jóvenes de raza blanca, atacan a una niña afroamericana. En escena se muestra que la golpean y atan, luego en el transcurso de la película, se narra en detalle el ataque. Violación, intento de ahorcamiento, y posterior lanzamiento del cuerpo a un río. Tonya tiene sólo 10 años, y contra lo que podían anticipar sus atacantes, sobrevive, y los identifica. Los dos autores, son detenidos en un bar, por el sheriff, que es un hombre afroamericano. Por la tarde de ese día, Carl Lee, padre de Tonya, interpretado por Samuel L. Jackson, visita la oficina de Brigance, a quien éste conoce, por haber defendido a un pariente suyo en el pasado. La conversación se centra en la brutalidad de lo ocurrido, Brigance se manifiesta impactado porque conoce a la niña, y porque él mismo es padre de una niña pequeña. Finalmente, Carl Lee, le pregunta al abogado, “¿Jake, si yo estuviera en un problema, tú me ayudarías? A lo que el abogado responde afirmativamente. Más tarde Jake llega a su casa, donde lo espera su esposa e hija. Le comenta a ella, “No puedo dejar de pensar en lo que hicieron esos animales, y que pueden salir libres y andar en las calles”. Y le cuenta sobre la visita de Carl Lee, y sobre lo que le dijo, y le comenta “Da la impresión de que quiere hacer algo, tal vez matar a esos muchachos”. Su esposa, le dice, “alguien debería hacer algo, como contárselo al alguacil”. Durante esa noche, se muestra a Carl ingresando al edificio de los tribunales de justicia de Canton, en un paneo se muestra que se detiene a mirar una inscripción del piso. En el centro del edificio, en el piso, está pintado el escudo del estado de Misisipi. Un águila custodiando una bandera, y una inscripción en latín “Virtute et armis”, valor, virtud y armas. Al día siguiente, se inicia el juicio en contra de los atacantes de Tonya. Toda la comunidad se congrega en el palacio de la Corte de justicia. En medio del público y periodistas, son ingresados los acusados. De pronto, surge desde el interior del edificio, Carl Lee. Presuntamente se habría quedado oculto allí toda la noche. Porta un fusil M-16, con el cual ametralla a los dos acusados, y es herido también un alguacil. Allí se inicia, la parte central de la película, centrada en el juicio. Carl Lee, es visitado en la cárcel por Jake. Allí Lee, le recuerda su promesa que le ayudaría, si estuviera en problemas. Le cobra la palabra, y Jake no puede retractarse, aunque no es su especialidad el juicio por homicidio. El factor racial, está fuertemente presente durante toda la película. Se hacen contrastes visuales, entre la extremadamente blanca, y confortable vida de Jake y su familia, con la modesta vida que lleva Carl, y su familia, todos afroamericanos. Con ocasión del juicio, en la iglesia bautista a la que asiste Carl, se inicia una campaña de recolección de fondos, para ayudar a su familia. A la sazón Carl, se da cuenta que el pastor ha sido contactado por la NAACP (National association for advancement for the colored people), quienes pretenden usar su caso, para reimpulsar en todo el país, la lucha por los derechos de la gente de color. De hecho, a propósito del costo de la defensa que hará Jake, y que él no puede costear, les pide reunirse. En esta ocasión confronta a la poderosa organización, y al equipo de abogados de primer nivel que desean tomar su caso. Lo central aquí es que, por buscar figuración para su causa, han olvidado y abandonado a su familia, la que no ha visto un centavo de lo recolectado en la iglesia. Carl Lee opta por la defensa de Jake, aunque sea un abogado blanco. Familiares y amigos de los fallecidos, aparentemente simpatizantes de los “supremacistas blancos”, contactan al Klu Klux Klan, con quienes organizan ataques tanto a la oficina, y casa de Jake y de su secretaria. A su pasante (una jovencísima Katherine Fuloph), la secuestran y golpean. También esta organización intenta transformar, la muerte de los dos jóvenes, en una razón para avivar la causa, de la segregación racial, y de la no integración. El film nos muestra una vez más, el funcionamiento de las cortes de justicia en Estados Unidos. El juez, al inicio del juicio informa que, en el estado de Misisipi, no se permite “La violencia vigilante”, y “Se da inicio al juicio en contra de Carl Lee Haily, por la muerte de……. Un ser humano, y de …………, otro ser humano”. El sistema de justicia de Estados Unidos, descansa sobre la noción de justicia, que el propio pueblo, tiene e imparte. El jurado es seleccionado por sorteo, y es el encargado de dictar el veredicto: Guilty or nor guilty. Un sistema muy distinto a nuestro proceso penal. Los tecnicismos legales, y la elocuencia, o los recursos discursivos del fiscal y del abogado defensor, son determinantes. Así como saber objetar o seleccionar a los jurados correctos. Los hechos son claros y no admiten cuestión alguna, Carl Lee disparó y dio muerte a dos “seres humanos”. Lo que se debe determinar es si es culpable de homicidio y debe ser condenado a muerte, o no. El hecho de que los fallecidos, hubieran cometido una violación y ataque atroz a una menor de edad, no es materia de este juicio. Sin embargo, constituye la base de la defensa, para tratar de probar que Carl Lee, actuó privado de razón. En un arranque de demencia, que le hizo perder la capacidad de distinguir el bien del mal. En el resumen, que hacen el fiscal y la defensa, en su alegato final, ante el jurado. El fiscal expone como el acusado Carl Lee Haily, actuó con total control, planificando y llevando a cabo, el ataque mortal contra los dos jóvenes. Sosteniendo que su determinación de tomar la justicia en sus propias manos, que llevó a cabo planificada y fríamente, no podría entenderse como el acto de alguien privado de razón. En tanto, Jake Brigance, destinó su tiempo, a hacer una reseña detallada del ataque, las lesiones, y los actos de crueldad que cometieron los fallecidos, con la pequeña Tonya. Haciendo uso de recursos de imaginería, hizo a todo el jurado cerrar sus ojos, para que sintieran, todo lo que la niña sintió. Esto produjo una gran emoción en los jurados y en el propio Jake, el que, con lágrimas en los ojos, concluye su exposición, diciendo: “Ahora imaginen que era una niña blanca”. El resultado de la votación del jurado, declara inocente a Carl Lee Haily, y lo deja en libertad. Considerando que el jurado está constituido por ciudadanos, por el pueblo, podríamos inferir que su pronunciamiento se basa en las normas morales de la comunidad de Canton, estado de Misisipi. Bajo esa norma moral, el haber perpetrado un ataque bestial contra una niña de 10 años, era un crimen de gran magnitud, y atentaba gravemente en contra de los valores de la comunidad misma. “Virtute et armis”, virtud, valor y armas, la enseña del escudo del estado de Misisipi, refleja de algún modo, el proceso de composición, el equilibrio, que los miembros del jurado hicieron. No se estableció que Carl Lee Haily, tomó la justicia por propia mano, caso en el que debía ser condenado a muerte. Se asumió, en definitiva, como justificada su acción. Es probable, que se haya aceptado formalmente el argumento de la demencia momentánea. Lo que en el juicio no se aclara. Lo que resulta evidente, es que en la conversación de Carl Lee Haily y Jake, existe indicios de un actuar racional, de alguien que planifica una acción, conociendo las consecuencias. Razón por la que las anticipa, y busca procurarse defensa posterior. La conversación de Jake con su esposa, demuestra la existencia de una norma moral, no explícita, donde Jake reconoce que si su hija pequeña fuera atacada, él no se quedaría sin hacer nada. Es una especie de validación de la autocomposición, en casos de extrema gravedad como el que se comenta. Desde el punto de vista ético, tanto Carl Lee como Jack Brigance, infringen normas éticas. Ambos están conscientes, de que sostuvieron una conversación previa al ataque mortal, donde se reconocía una premeditación. Una evaluación de riesgos, y búsqueda de remedios futuros, que no se condicen con el actuar de un loco o demente. Desde este punto de vista, ambos mintieron ante la corte. En el caso de Brigance, la falta ética es mayor, por cuanto, él fue puesto en antecedentes, de que Carl Lee algo iba a hacer. “Tal vez ataque a esos muchachos”, le reconoce a su esposa. Pero no hizo nada, hecho que su esposa le recrimina, una vez que conoce del ataque. “Tal vez si hubieras informado al alguacil, esos muchachos estarían vivos ahora. Y tú no estarías involucrado en este juicio”, le dice con claridad meridiana su esposa. El reproche ético que se le puede hacer a Jake, es porque no actuó preventivamente. No hizo nada por evitar que pudiera ocurrir un mal, del cual tenía indicios fundados de que podía sobrevenir. Por otra parte, mintió o encubrió un crimen, del cual estaba en antecedentes, y mintió argumentando locura o demencia. Él sabía, que el crimen fue cometido en pleno uso de sus facultades por Carl Lee Haily. El factor racial, es invocado durante todo el film, por Carl Lee, incluso hostigando a Jake, de que, pese a que lo estaba defendiendo, eran distintos. No eran amigos, ni conocían sus casas ni sus familias se visitaban. Surge entonces el cuestionamiento acerca del valor de la vida. El discurso del supremacismo blanco, es totalmente contrario a reconocer, su condición de seres humanos, nacidos con iguales derechos, y una dignidad inalienable. Desde esa lógica, que degrada a los miembros de otras etnias, u origen racial, a seres inferiores, estaba justificado, o no era punible lo que los atacantes hicieron a Tonya. En tanto, desde el punto de vista de la NAACP, el caso de Carl Lee Haily, permitiría avivar la confrontación en todo el país, fortaleciendo el activismo por los derechos de las personas de color. En el estado de Misisipi existe la pena de muerte, por tanto, los atacantes de Tonya, de haber enfrentado un juicio, podrían haber recibido la pena capital. Lo que se trasunta en todo el film, es que casos como ese, fallados por jurados mayoritariamente blancos, quedarían sin castigo. Del mismo modo, se da a entender que el caso de Carl Lee Haily, sería sancionado con la pena de muerte por un jurado del condado de Canton, dada su composición racial. La resolución del caso, con la liberación de Carl Lee Haily, abre una interrogante, sobre el tipo de mensaje que se quiere entregar en la película. Es un llamado a la autocomposición? ¿A buscar la justicia por propia mano?, ¿o es sólo un llamado de atención, sobre las aberrantes diferencias de trato, dependiendo del color de piel? La necesidad de dialogo interracial, de encuentro entre personas de distinto origen étnico, tal vez resulte ajeno a nuestra realidad latinoamericana. Pero el debate moral y ético, asociado a la idea de justicia, nos llega muy cerca, si lo asociamos con los migrantes, con las minorías sexuales, o con los pobres. Ernesto Sepúlveda Tornero

domingo, 26 de septiembre de 2021

EL PRIMER DEBATE

Esta semana partió la presidencial. Fue el inicio de las campañas electorales a presidente, parlamentarios y consejeros regionales. Lo que marcó la pauta fue el primer debate televisivo, que transmitió CNN-CHV. Un nuevo formato, que quitó el protagonismo a los periodistas, y lo entregó a los candidatos. Un acierto, dado el espectáculo brindado en las campañas de primarias, donde entrevistadores, no dejaban a hablar a candidatos, a fuerza de interrupciones. Fue bueno, escuchar más a los protagonistas de la elección, que a las figuras de los medios. Fresco está en la memoria, como un joven diputado por una zona extrema, fue capaz de derrotar, a la figura icónica de la izquierda tradicional, gracias a su notable desempeño en la TV. El formato en que los candidatos administraban su tiempo, y el hecho de que fueran definidas por sorteo las interacciones entre ellos, restó intensidad, le faltó sazón, a los emplazamientos. Frases hechas, cuñas preparadas y ensayadas, no surtieron mayor efecto. Le pasó a Provoste con la frase que le dedicó a Boric, sobre su pacto con el PC. Donde le enrostraba que dicho partido “apoyaba dictaduras”. El aludido, respondió, recordándole a Provoste, que la democracia cristiana, había formado parte del gobierno anterior, junto al PC. Y que éste, a diferencia de la DC sí se leyó el programa y fue leal con el mismo. Los candidatos que se mencionan en las encuestas, como favoritos en primera vuelta, Gabriel Boric y Sebastián Sichel, procuraron emplear su tiempo para exponer contenidos de sus programas. Se vio a Boric, estrenar un aspecto más formal, vistiendo un saco gris. De hecho, su performance en el debate, fue de mayor contención, lo que a algunos les pareció, que le restaba espontaneidad. En cuanto a Sichel, hizo uso de su locuacidad habitual, sorteando con mayor o menor dificultad los emplazamientos. Nunca se le vio complicado, pero quien mejor logró atrincarlo, fue el profesor Artés, cuando lo invitó a asumir su condición de candidato de derecha, y candidato de gobierno. Lo que dejó en evidencia, los amplios giros que ha tenido en su postura política Sichel. Caso a mencionar, fue el candidato Kast, quien, aplicando un esquema de campaña, propio de la ultra derecha en todo el mundo. Abundó en frases tajantes, afirmaciones sin sustento, y otras manifiestamente erróneas o falsas. Como cuando le sacó en cara a Provoste un hecho comprobadamente falso, que le atribuye responsabilidad en malversación de caudales públicos el mineduc. Fue un momento tenso, ya que Provoste, le respondió con firmeza, aludiendo a que Kast usaría la mentira como recurso político. La pregunta de Boric a Kast, permitió a este diferenciarse con claridad del gobierno, y sus desaciertos, y dirigir su discurso a los desencantados de la UDI, partido en el cual militó en el pasado. Respecto de este primer debate, puede señalarse que las candidaturas deberán revisar sus estrategias, para poder expresar con mayor claridad sus ideas fuerza. Candidaturas que figuran en tercer y cuarto lugar, deberán arriesgar más, caso contrario su suerte va a estar sellada. Los temas que preocupan a la ciudadanía, deben estar más presentes, y con mayor visibilidad, para que destaquen las ideas y propuestas, más que las disputas o descalificaciones personales entre los candidatos. Hay una frase paradigmática en las campañas políticas: “Es la economía, estúpido”. Fue acuñada por James Carville Jr., abogado y destacado asesor de las campañas demócratas en Estados Unidos. Formó parte de la exitosa campaña que llevó a la Casa Blanca, a Bill Clinton en 1992. Alude a que siempre debe estar en el centro de la campaña, las preocupaciones de la gente. En Chile, debemos enfrentar la situación económica post pandemia, la necesidad de generar una potente agenda de reactivación, no se puede esperar a marzo de 2022, para definirlos. Un primer tema, es el presupuesto que deberá ejecutar el próximo gobierno. La reducción del déficit fiscal, es una necesidad que todas las candidaturas asumen como imprescindible. Sin embargo, la velocidad e intensidad con que se retire el estímulo fiscal, provoca controversia. El proyecto del gobierno representa un recorte en el gasto público del 22,5% sobre la ejecución proyectada para el presente año. En una reducción estimada excesiva, el presupuesto presentado por el gobierno reduce el déficit fiscal de 11,5% a un 3,9% del producto interno bruto. No es un tema para dejarlo al azar, el retiro del impulso monetario, puede ralentizar la recuperación económica, y un bajo crecimiento económico, incide en baja capacidad de generación de empleos. En otro aspecto fundamental de la economía, que parece correr, en un sentido contrario al estímulo monetario. El Banco Central, ha advertido de los nefastos efectos sobre la inflación, que tienen los llamados “retiros de las AFP”. En una escena que sólo recordábamos de los años 80’, el fantasma inflacionario, se nos aparece, en el momento menos propicio, en medio de una campaña electoral. Estas son decisiones de estado, que requieren que el liderazgo escuche a los especialistas, son decisiones técnicas, que repercuten en el éxito o fracaso de los gobiernos. Otro tema que debe estar en la definición presidencial, y que esta semana se ha tomado los espacios de noticias, es el fenómeno de la migración. Somos receptores de un flujo constante de migrantes de otros países del continente, donde predominan venezolanos, colombianos, y dominicanos. El pésimo gobierno de Piñera, ha sido contradictorio e irresponsable, montó un show en Cúcuta, frontera de Colombia con Venezuela, invitando a migrar a Chile, miles de venezolanos han venido. Hoy tenemos en Colchane e Iquique una situación sanitaria y social insostenible. La presión sobre la escasa población local, es inaudita, las autoridades locales entregadas a su suerte. Las candidaturas presidenciales deben presionar al gobierno. Se debe garantizar condiciones mínimas de salud e higiene a los migrantes. Se debe sensibilizar a la población sobre el infierno del cual vienen escapando estas personas. Y como sociedad debemos asegurar, que nunca más sucedan hechos de violencia, como los vistos en Iquique. Gran parte de nuestros candidatos presidenciales descienden de migrantes. Somos una sociedad inclusiva y tolerante, hemos sido crisol de pueblos y culturas, es hora de demostrarlo con actos nobles, generosos, que engrandezcan el espíritu, y mostremos al mundo lo mejor de nosotros. Ernesto Sepúlveda

domingo, 19 de septiembre de 2021

INDEPENDENCIA DE CHILE

Amigos y amigas. Hemos cumplido con los ritos y tradiciones populares, que celebran un nuevo aniversario patrio. En cada rincón del país, se compartió con alegría, en familia, con los amigos y seres queridos. Un momento de solaz en medio de un año que ha sido difícil para todo Chile. Se volvieron a ver las disputas en redes sociales, sobre la verdadera fecha de nuestra independencia. Se cuestiona, no sin razón, que celebremos la fecha de constitución de la Junta de gobierno de 1810, como el inicio de nuestra independencia. En ningún caso, podría interpretarse como un acto de independencia, la instalación de la Junta de gobierno el 18 de septiembre de 1810. Dicho evento, marca un hito en una incipiente organización política de la colonia de Chile. Sin embargo, la junta de gobierno, se enmarca dentro del movimiento, que se dio en toda la península ibérica, y en los dominios de ultramar, para defenderse del invasor francés. La primera de estas fue en Cádiz, expidiéndose a todos los dominios de la corona española, recomendaciones de obrar de manera semejante. El texto suscrito, en tales juntas, es explícito, y así lo consigna el acta de la Junta de Chile de 1810, que se conserva en bóveda del Archivo Nacional. Esta declara que se desea “conservar el dominio de estas tierras a su legítimo dueño y desgraciado monarca, señor don Fernando Séptimo”. Es probable que mas de alguno de los connotados vecinos de Santiago, convocados a este evento, albergaran ya, ideas de independencia, pero en esta ocasión no se hicieron visibles. Por otra parte, el acta de la independencia en su texto original se encuentra desaparecido, presumiblemente destruido. Se conserva en el Archivo nacional, una copia del texto usado como proclamación de la independencia. Este texto aparece fechado en Santiago a 12 de febrero de 1818, sin embargo, hace mención al acta suscrita por el director Supremo don Bernardo O´Higgins, en el “Palacio directorial de Concepción, el 1 de enero de 1818”. Existe controversia sobre el lugar de la firma, ya que algunos sostienen que materialmente se habría producido la firma, en los morrillos de Perales, cerca de Talcahuano, el 1 de enero de 2018. De cualquier modo, nuestra independencia se habría sellado formal y materialmente, en 1818, el 1 de enero, fecha de la firma del acta, o del 12 de febrero, fecha de su proclamación. Se estima que la fecha se optó por trasladarla a septiembre, por dos consideraciones. El propio texto del acta de independencia, señala: “La revolución del 18 de septiembre de 1810 fue el primer esfuerzo que hizo Chile para cumplir esos altos destinos a que lo llamaba el tiempo y la naturaleza; sus habitantes han probado desde entonces la energía y firmeza de su voluntad, arrostrando las vicisitudes de una guerra en que el Gobierno español ha querido hacer ver que su política con respecto a la América sobrevivirá al trastorno de todos los abusos.” En el texto los propios padres de la patria, le otorgan un carácter de revolución, a la constitución de la junta de 1810. Esto a su vez, admitiría interpretaciones, ya que se habría buscado fijar una línea de continuidad que le conferiría legitimidad, al esfuerzo de incipiente organización política. Asimismo, es dudosa esta interpretación, por la declarada lealtad y devoción al “legítimo dueño y desgraciado monarca Fernando séptimo”. Otra consideración, que pesó en la decisión de celebrar en septiembre, es que, en aquella naciente República de inicios del siglo XIX, la economía se sostenía fundamentalmente de la actividad agrícola. Chile era rural, y las actividades mas importantes, eran las de cosecha, que se efectúan precisamente en los meses de verano, Por tanto, con un espíritu práctico notable, se optó finalmente por celebrar en septiembre, permitiendo la continuidad sin interrupciones de las cosechas agrícolas. Es hermoso, y muy ilustrativo, leer ese texto de la proclamación de la independencia de Chile, para recordar de donde venimos. “...No permitiendo las actuales circunstancias de la guerra la convocación de un Congreso Nacional que sancione el voto público, hemos mandado abrir un Gran Registro en que todos los ciudadanos del Estado sufraguen por sí mismos, libre y espontáneamente, por la necesidad urgente de que el Gobierno declare en el día la independencia, o por la dilación o negativa.” “ Y habiendo resultado que la universalidad de los ciudadanos está irrevocablemente decidida por la afirmativa de aquella proposición, hemos tenido a bien, en ejercicio del poder extraordinario con que para este caso particular nos han autorizado los pueblos, declarar solemnemente, a nombre de ellos, en presencia del Altísimo, y hacer saber a la gran confederación del género humano, que el territorio continental de Chile y sus islas adyacentes, forman de hecho y por derecho, un Estado libre, independiente y soberano, y quedan para siempre separados de la Monarquía de España, con plena aptitud de adoptar la forma de Gobierno que más convenga a sus intereses”. La decisión de los padres de la patria, en orden a impulsar un proceso de independencia total y absoluta, a partir de una aparente concesión de la metrópoli, nos muestran la sabiduría y la intrepidez de quienes nos precedieron. Asimismo, ilumina nuestros pasos en la senda constituyente. Es una luz de esperanza que perfora las tinieblas de los siglos, y nos muestra como fuimos capaces de organizarnos y como volveremos a hacerlo. Es un camino de continuidad y cambio, que nos sitúa 200 años después, en condiciones de fortalecernos con miras al futuro. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 20 de septiembre de 2021.-

domingo, 12 de septiembre de 2021

LA SENDA INCONCLUSA

Esta semana conmemoramos en Chile, un nuevo 11 de septiembre. Fecha que conecta con el sentir más profundo de los luchadores sociales, de los militantes del progreso social, de los demócratas, y en especial de quienes participamos de la izquierda. Este año en particular, no ha dejado a nadie indiferente. Estamos inmersos en un proceso constituyente, al cual se llegó luego de movilizaciones sociales multitudinarias en el país. En una especie de giro de la historia, esto ocurre, 48 años después del golpe cívico militar, que derrocó por las armas, al gobierno democrático de Salvador Allende. La fractura dramática, sangrienta y brutal de la dictadura, tal vez, con este proceso constituyente empiece a cerrar. No podemos afirmarlo con certeza, más que nada, son nuestros anhelos que afloran. Nuestros deseos de encontrar por fin esa justicia social, esa libertad que llegue hasta los más humildes de los humildes. Nos reencontramos con el corazón apretado, con la promesa de dignidad del gobierno de la Unidad Popular. 48 años después, cobra todo su sentido: “Dueños de nuestro propio destino”, la enseña que distingue al gobierno del Presidente Salvador Allende. Pese a los intentos de silenciar, de ocultar la historia, ésta, tarde o temprano se va abriendo paso, primero por las rendijas, tras bambalinas, dicho en sordina. Hasta llegar al gran escenario. Es lo que ha sucedido esta semana con la gesta del Presidente Allende y su gobierno. Después de haber sufrido la censura en todos los canales de TV, incluido el canal público, se transmitió el galardonado film “La batalla de Chile”, de Patricio Guzmán. Finalmente, 50 años después se pudo ver a través del canal de TV abierto, la RED, las tres películas que comprenden la obra. Causó un gran impacto, fue trending topic mundial en la red social twitter. Y por rating superó los 8 puntos, dejando atrás a todos los canales de TV abierta. Las redes sociales se llenaron de comentarios, de sorpresa, de indignación, de rabia. Las imágenes de época, que corresponden al género documental, constituyen una mirada a como vestían, como hablaban, como pensaban y soñaban, nuestros compatriotas en el año 1970, y hasta 1973. Una muestra palpable, del nivel de conciencia social y política, de los obreros, de los campesinos y pobladores por todo Chile. Las esperanzas y anhelos volcados en el gobierno de la Unidad Popular, se demuestran en la masividad de las concentraciones y marchas, en apoyo al presidente Allende y su gobierno. Y también en el histórico resultado de las elecciones parlamentarias de marzo de 1973, donde la Unidad Popular obtuvo un 43,4%, impidiendo al Partido Nacional y a la DC, contar con los votos para destituir al presidente. Queda en evidencia, lo que hoy está absolutamente comprobado, la injerencia del gobierno de Estados Unidos, a través de su departamento de estado, y de la CIA, en las acciones terroristas contra el gobierno de Salvador Allende. Bombas que volaron puentes, gasoductos, oleoductos, vías férreas, a través de grupos fascistas organizados y financiados por la CIA. Recursos para el boicot del transporte, y para financiar a los partidos opositores. Por primera vez, se muestra al gran público de Chile, las acciones sediciosas de los mandos de las FFAA, que traicionaron su juramento de acatar la constitución y obedecer al poder civil. El inaceptable bloqueo legislativo, la seguidilla de acusaciones a ministros del gabinete e intendentes, todas las mañas de la vieja política, fueron exhibidas en televisión. Y nada impedirá el juicio ciudadano. Para romper el bloqueo político a su gobierno, y para evitar que se concretara una guerra civil en Chile, el presidente Allende, transmite al jefe de la oposición DC en el congreso, Patricio Aylwin, que convocará a un plebiscito, para que el pueblo decida sobre la marcha del gobierno y del país. Los golpistas, que ya habían fracasado en junio de 1973, en el intento de golpe de estado, denominado “Tacnazo”. Adelantan sus planes, asesinan al comandante Araya, edecán naval del presidente, y su nexo con la oficialidad de la Armada. En el ínterin, la DC presenta un conjunto de condiciones, para destrabar la relación con el gobierno, que son consideradas inaceptables. Una de ellas, exigía la incorporación al gabinete de ciertos oficiales de las FFAA, que decidiría la DC. La suerte del gobierno quedó de esa forma sellada, y el golpe de estado era inevitable. Múltiples reflexiones motivan, el ver el documental “La batalla de Chile”, en TV abierta, junto a cientos de miles de personas por todo Chile. Quiero mencionar un par de ellas. El presidente Allende dijo “No se detienen los procesos sociales, ni por la cobardía, ni por la traición, ni por el crimen”. Tenía razón el presidente, en un sentido de tiempo histórico. Estamos ad portas de una nueva elección donde competirá la izquierda, contra la derecha, y una candidatura de la DC. En un sentido histórico, la fractura que sufrimos en los 17 años de dictadura, fueron una suspensión, no la detención de los procesos sociales. Y el movimiento popular de octubre de 2019, la eclosión de procesos que han venido madurando durante 30 larguísimos años. En una vuelta de tuerca de la historia, una candidatura de izquierda tiene grandes posibilidades de triunfar en la presidencial. Con una juventud no exenta de contradicciones, el pueblo de Chile, optará por ese proyecto. No se aprecia indicio alguno de que el electorado se identifique ni con las candidaturas de derecha, ni con la candidatura de la DC. Al parecer, las reacciones a un simple documental histórico, son una pequeña muestra, una leve y fugaz mirada, a una posición política progresista que se ha ido consolidando. Una población distante, del discurso estructurado, y profundamente ideológico del año 70’, pero con una concepción clara, de rechazo del abuso, de la injusticia, y un apego radical a la libertad en los términos más amplios. Lo que narra el documental “La batalla de Chile”, es una gesta inconclusa, es una senda que queda por caminar, y es una invitación que nos hacen, esos hombres y mujeres, a través del tiempo, a través de los años, a través de las penurias y pellejerías. Para que hoy, como herederos de ese proceso, seamos también “Dueños de nuestro propio destino”. Ernesto Sepúlveda Tornero