domingo, 30 de marzo de 2025

AUNQUE ME DUELA DEJARÉ A DANIELA

Esta semana partió el famoso y querido Tommy Rey, el líder de la Sonora del mismo nombre. Gracias a los numerosos programas que cubrieron su vida y obra, sabemos que le debemos a él, entre otros artistas, el haber adaptado el ritmo tropical, a nuestro gusto más pausado. Un creador con un sentido estético notable, el timbre de su voz de barítono, al decir de muchos les daba elegancia a sus presentaciones. Los impecables trajes de fiesta que vestía la orquesta, completaban un espectáculo macizo, de calidad superior. Poco se sabía del compromiso político y social de Tommy (por cierto, ese no era su nombre real, pero así se hizo conocido y así se fue). Sus presentaciones en la fiesta de los abrazos, del glorioso partido, y un tema dedicado nada menos que a la emblemática Gladys Marín, muestran a un artista comprometido, cosa no muy común por estos días. En fin, que el hombre hizo historia en muchos ámbitos, incluso con una versión del himno del equipo popular. El himno de Colo-Colo en versión cumbia, lo consagra también como ídolo y figura del cacique. Esta semana un impresionante minuto de silencio en el estadio Monumental, logró lo que no han logrado ni futbolistas, ni dirigentes, ni políticos, tener al estadio entero guardando silencio. Algo que representa mucho para un artista del pueblo y su familia. Ahora se sabe, como los milicos lo iban a buscar a su casa, en dictadura, para que fuera a tocar a regimientos o a fiestas de oficiales, no había como negarse. Las noches más oscuras, se llenaban con su música y alegría. Pero en esos tiempos los que no eran obsecuentes con el régimen, no prosperaban, y ahí se produjo una de las grandes penas de don Tommy, cuando en 1987 las autoridades de la época lo bajaron del Festival de Viña. Pero el hombre era resiliente y continuó con su carrera de excelencia, hasta que años después ya en democracia, participó en dos versiones del festival, cubriéndose de gloria. Podría decirse muchas más cosas de Tommy Rey, pero en lo que a mí me interesa, y es la razón por la que lo menciono en este espacio, es por las muestras de cariño y agradecimiento que marcaron su despedida. Personas de distintas edades, de todas partes y de todas condiciones sociales, recordando los momentos de alegría que acompañaron su música. En tiempos en que los afectos son tan frágiles, donde hasta los sentimientos más profundos, se miden en likes de una red social. En tiempos de lo efímero, de lo fugaz, llama la atención un afecto, un cariño, que permanece en el tiempo, ajeno a los brillos pasajeros de la sociedad de consumo. Tal vez en nuestro país, estamos huérfanos de figuras potentes, que hermanen generaciones, grupos sociales, que trasciendan épocas. Vivimos los últimos veinte años marcados por figuras centrales que fijaron los rumbos del país y de la política. Sólo dos figuras marcaron los destinos de la patria los últimos 15 años, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, ambos dos veces electos en la más alta magistratura del país. No hay otro liderazgo que se asemeje al de estas dos figuras consulares. La sorpresiva e inesperada elección presidencial de Gabriel Boric, por ahora constituye un paréntesis, y no se puede anticipar si llegará a transformarse en un referente que trascienda a su sector político y a su gobierno. La disputa por el liderazgo político se está dando hoy, entre figuras archi conocidas de los últimos 30 años en Chile. Como en una suerte de resaca, el agua retrocede nuevamente mar adentro, todas las encuestas indican que continuará el ciclo iniciado en 2010, donde progresistas y conservadores se turnan en el poder cada cuatro años. Con las magras cifras económicas, mejorando levemente, el gobierno que pregonaba ser la tumba del neoliberalismo, ha debido conformarse con ser un gobierno social demócrata de moderado éxito. Tal vez el mayor aporte que ha hecho el actual presidente, ha sido dar cauce a las pulsiones rupturistas originales, y conducir su gobierno, en la forma en que podía hacerlo, dadas las circunstancias. No olvidemos que el joven político, dejó en el camino al acorazado de las fuerzas antisistema, y de paso, permitió detener al sector ultra conservador. Hoy el horno no está para bollos, y desde las dos veredas ven con igual estupor el avance, de las fuerzas políticas más retardatarias que han surgido en Chile, desde aquel grupo Avanzada Nacional que dirigía un ex agente de la CNI, hoy en presidio perpetuo. Se trata ya no de las ideas pro mercado y anti regulaciones de la derecha tradicional, se trata de una completa agenda ultra conservadora, ajena a la idiosincrasia de los partidos tradicionales. La hasta ahora imbatible figura opositora de doña Evelyn, parece titubear frente a figuras tan extremas. La tentación de ponerse más y más dura, abre un insólito espacio, para alguna candidatura progresista, que pueda zafar del voto rechazo al gobierno, y pueda rescatar votantes temerosos de que Chile retroceda décadas en libertades personales. Cuando miro todo esto, lo hago desde los remotos dominios de la zona extrema Magallanes, quienes hacemos patria en esta bella tierra, sabemos que nos enfrentamos al centralismo más brutal, que cambia de color político, pero sigue apretando del mismo modo. No somos dóciles por estos lados, y así lo demostramos en 2011 con el paro del gas. Exigimos nuestro lugar en la mesa, para que las decisiones que nos atañen se tomen en el territorio y no en una fina oficina del barrio cívico de Santiago. La voz de las regiones debe ser escuchada y será escuchada, por quienes pretenden entrar a La Moneda en 2026. Así ocurrió en campañas presidenciales anteriores, y así tendrá que ser de nuevo. En el caso del actual presidente, esta misma semana nuestros representantes regionales, le recordaban su compromiso con las regiones. Moraleja, nunca prometas lo que no vas a cumplir. Esta vez, era respecto a la figura cuasi imperial de los delegados presidenciales, acá se ha dicho hasta el cansancio, no se puede gobernar con dos cabezas. En la memoria con una dulce y cadenciosa canción que recuerda a Daniela, con el corazón henchido de amor por nuestro pueblo, y la esperanza intacta en el futuro de Chile y Magallanes. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 31 de marzo de 2025.-

domingo, 16 de marzo de 2025

LOS IDUS DE MARZO

Cuando se suponía que la cercanía de las definiciones presidenciales, haría girar todo en torno a eso, el guion de este reality llamado Chile, tuvo un vuelco inesperado. Revelaciones dentro del proceso penal que se sigue por la frustrada compra de un bien raíz del municipio de Santiago, derivaron en un intento de censura a la mesa de la Cámara que preside la diputada del PC Karol Cariola. El fundamento de la petición, serían supuestas acciones presuntamente constitutivas de delito por parte Cariola. De esta situación, los parlamentarios como la opinión pública, tomaron conocimiento, a través de “filtraciones”, de indagatorias practicadas por el ministerio público. Se trataría de chats entre la ex alcaldesa Hassler y su compañera de partido, referidas a cierto empresario de origen chino, que habría solicitado gestiones de la diputada ante la alcaldesa. El tenor de las conversaciones, daba la impresión de que alguna gestión se habría realizado, aun cuando en los hechos eso no ha sido comprobado. Cabe señalar que la diputada Cariola se encontraba a la sazón haciendo uso de permiso de pre natal. Este hecho es importante, por cuanto, la fiscalía ordenó practicar una diligencia de incautación del celular de la diputada, y esta, se realizó ni más ni menos, cuando se encontraba dando a luz. Una situación insólita, nunca antes ocurrida a una dirigente política en democracia. Rápidamente los actores del progresismo salieron a pedir explicaciones al fiscal nacional, en tanto políticos conservadores, respaldaron la medida e incluso la oportunidad. El fiscal de la causa arguyó, que dado el vínculo entre la ex alcaldesa Hassler y la diputada, por seguridad de la investigación debía procederse de inmediato. Con los sofisticados sistemas tecnológicos de las comunicaciones existentes, es prácticamente imposible eliminar totalmente, la mensajería electrónica, por lo que al menos, eso de la seguridad de la investigación, no parece argumento suficiente para irrumpir con policías armados prácticamente en la sala de parto. La diputada Cariola ha anunciado acciones ante la Corte Interamericana de justicia, por violación de sus derechos fundamentales. A la sazón, el día de la sesión de la cámara donde se votaría la censura, ante el horror de sus contradictores ultra conservadores, la presidenta de la cámara concurrió a la sala con su hijo recién nacido en brazos. Lo que a su vez abrió otra discusión acerca de si existía algún tipo de maltrato infantil, por tratarse de un pequeño de escasos días de vida. Se habló de victimización, instrumentalización política, y un largo y desagradable etcétera, para que finalmente la petición de censura fuera rechazada ampliamente. El hecho en sí constituye un precedente gravísimo, la protección de la maternidad es un deber de estado y de la sociedad, y no se puede relativizar. La memoria es frágil, pero en agosto de 2024, se conoció el fallo del Juzgado Civil de Concepción, que ordena al fisco indemnizar con $100 millones por concepto de daño moral a Lorenza Cayuhan, interna que en 2016 dio a luz engrillada en el Sanatorio Alemán. El fallo del tribunal sostiene que la mujer sufrió un trato vejatorio e indigno, discriminatorio y tendiente a degradarla en su condición de mujer, gestante y parturienta, privada de libertad. Guardando las obvias proporciones, se trata de casos en que el derecho de protección de la maternidad, se alza por sobre las consideraciones de seguridad procesal o medidas de vigilancia penitenciaria. Y esto aplica, sea la diputada Cariola o sea la ex alcaldesa Katy Barriga, no se puede sesgar políticamente esta protección. Simplemente, se trata de mínimos que no debieran estar sujetos a la discusión entre las bandas políticas. El rechazo de la censura de la mesa directiva de la cámara, fue registrado como un triunfo político de la mesa oficialista, y un triunfo personal de la diputada Cariola. De todos modos, por el acuerdo de administración de la cámara, suscrito en 2022 entre bancadas parlamentarias, corresponde que la mesa entregue sus cargos a nuevos integrantes en el mes de abril, así que la votación sólo buscaba una sanción política, por los hechos que investiga la fiscalía. Pero como el guion de Chile, nos sorprende cada día, nos cae a través del diario favorito para filtraciones de fiscalía, La tercera, un reportaje que publica textos completos de chats entre la diputada Cariola y la ex alcaldesa Hassler. Son conversaciones privadas entre dos mujeres adultas, ambas dirigentes políticas del PC. En esta charla, se puede apreciar el nivel de confianza entre ellas, y desafortunadamente, se hacen públicas, menciones y juicios que hacen tanto del gobierno en general, como de altos funcionarios como el ex jefe de gabinete del presidente, y de la ministra vocera que hace uso de post natal. Moros y cristianos se han hecho un festín, con los dichos Hassler y Cariola. Se han formulado toda clase de hipótesis, y sacado conclusiones. En honor a la verdad, el propio presidente Boric, situó las ofensivas y agraviantes expresiones, en el lugar que corresponde, conversaciones privadas entre amigas. Cualquiera de nosotros usa expresiones similares o más causticas aun, para referirse a cuanto tema nos interesa. Es el ejercicio de una libertad personal, que no debiera caer bajo la vigilancia policial. Harto nos costó recuperar la democracia y la libertad, para que nuestras libertades esenciales, caigan bajo el arbitrio de un funcionario menor. En esto no debiera existir duda alguna, y fíjense que protagonistas importantes de la política nacional, también estuvieron involucrados en una espuria operación de escuchas telefónicas. Fue el bullado caso de a “radio Kyoto”, búsquenla amiguitos (as) se van a entretener. Spoiler: protagonizado por el ese entonces pre candidato presidencial, el finado Sebastián Piñera y la actual candidata del sector conservador Evelyn Mathei. Pero no hay peor ciego que él no quiere ver, y no nos podemos hacer los lesos, con lo que revelaron los chats, obtenidos espuriamente es cierto, pero lo que allí se dice no es menos cierto. Se rompe la ilusión de una armonía celestial entre los otrora jóvenes líderes estudiantiles, ¡oh! Sorpresa, son presa de las mismas viejas pulsiones humanas. Vanidad, ya lo sabíamos, deslealtad y traición, son antiguas en política. Pero si estamos ni más ni menos que en los Idus de Marzo, que recuerda la traición más importante en la historia política, cuando un 15 de marzo del año 44 AC, fue asesinado Cayo Julio César, por un complot de más de 50 senadores, quienes lo apuñalaron ritualmente en la Curia de Pompeyo. Los ayer jóvenes políticos de la izquierda chilena, no hacen sino replicar, o revivir, lo que otros hombres y mujeres de la política vienen haciendo, hace más de dos mil años. Es una pulsión asociada al poder político, y ni aun los más puros militantes comunistas están exentos. Un baño de realidad necesario, una enseñanza imprescindible, para bajarle unos decibeles al discurso grandilocuente. Aprendizaje que, si bien hizo tempranamente el presidente Boric, lamentablemente no ha ocurriro en gran parte de las cohortes de altos ejecutivos, que medran hoy en el gobierno. El intento de censura fracasado de una importante dirigente comunista, que se apronta a postular al senado por Valparaíso, seguido del mega escándalo de las conversaciones privadas sobre el presidente y su equipo, ponen al PC en una incómoda posición. Esto sucede al mismo tiempo que la tienda se apresta a decidir su candidatura presidencial, para la cual se menciona al ex alcalde Jadue (con menos posibilidades ya que está con arresto domiciliario), la ministra Jara, y también a la diputada Carmen Hertz, de la línea dura y cercana a Jadue. En el contexto de la primaria del progresismo, esta definición no es menor, dado los condicionamientos efectuados por la candidata del PPD Carolina Tohá, sobre el apoyo a Venezuela por parte de la cúpula comunista. Como era fácil prever, y así se comentó en este espacio, las encuestas de opinión siguen arrojando un famélico apoyo a la candidatura de la ex ministra Tohá, en encuesta Criteria, persiste una adhesión mayor a la presidenta Bachelet, que no está en competencia. Y los resultados arrojan adhesión mayor de todas las candidaturas conservadoras. De persistir esta situación en las próximas semanas, el progresismo deberá promover otras opciones, que hoy no están en competencia, de lo contrario, se cumplirá el ciclo de alternancia política, y dentro de un año, el presidente Boric, entregará la banda de O´Higgins a doña Evelyn. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 17 de marzo de 2025.-

domingo, 9 de marzo de 2025

EL INCOMPLETO NAIPE ELECTORAL

Esta semana fue una semana de sorpresas en el mundo político. Mientras millones de hombres y mujeres trabajadoras, retomaban la rutina de un nuevo año laboral y escolar, los políticos hacen lo propio de camino a las elecciones presidenciales y parlamentarias de noviembre. La sorpresa, a medias, fue la renuncia de la militante PPD Carolina Tohá a su cargo en el ministerio del interior, para encabezar una candidatura presidencial que debe ratificar su partido. Horas después la líder indiscutida del progresismo, y dos veces presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ratificaba lo que ya había sostenido innumerables veces, y que sus partidarios nos negábamos a aceptar, que no será candidata presidencial, y que apoyará la candidatura que determine el progresismo en su conjunto. Hubo alborozo en un sector de la ex concertación, por la decisión de Carolina Tohá, mal que mal, toda su carrera política la ha hecho ligada al ADN del conglomerado que le dio a Chile sus mejores gobiernos. También hubo desazón en el partido de la presidenta, el que esperaba se diera respuesta positiva a su invitación de repostularse, y esto se hiciera en el itinerario acordado con la presidenta Bachelet, en un pleno del comité central a mediados de marzo. No podemos saber en este momento, y será dilucidado por los historiadores, si a la ex ministra Tohá, su círculo de asesores, la apuró a renunciar anticipándose al pronunciamiento de la presidenta Bachelet, o se había decidido su candidatura, cualquiera fuese la decisión en el pleno del comité central del Partido Socialista. El hecho es que hoy ya se ha informado de una precandidatura presidencial, que muy seguramente será ratificada por las instancias formales del PPD. También es un hecho que la presidenta Bachelet, ha declinado una nueva postulación, y no adhiere ni entrega su apoyo a Carolina Tohá, sino que esperará la definición de candidatura que el progresismo realice en su conjunto. A escasos días de la noticia de la ex ministra Tohá, comenzaron las especulaciones y proyecciones de los analistas de diversos pelajes. Por una parte, se ha valorado que finalmente, una figura del progresismo asuma el desafío presidencial, fuera de la figura política indiscutida de Bachelet. Por otra, se advierte que, dentro de los siguientes quince días, deberá incrementar ostensiblemente su aprobación en las encuestas, dado el magro 3% que marcaba la semana previa a la renuncia. Convenientemente, el panel ciudadano de la UDD, ha dado a conocer este fin de semana, una encuesta respondida por ws por un grupo de personas, donde la ex ministra subiría mágicamente al 12%. Habrá que esperar los resultados de otras consultoras para ratificar estos datos. Esta información es de la mayor relevancia, ya que los otros siete partidos que integran hoy el oficialismo están en vías de decidir sus propias candidaturas. Todos los partidos ven la primaria como una disputa abierta en su resultado, dado las enanas cifras de aprobación exhibidas. Es muy probable que, dado este escenario, la primaria oficialista cuente con al menos 6 candidaturas. El partido socialista decidirá con posterioridad a sus elecciones internas del 16 de marzo, si mantiene resolución anterior de llevar una candidatura de sus filas a la primaria. Los medios han informado de algunos personeros socialistas que estarían trabajando y apoyando la candidatura de Tohá, temprana y apresuradamente, en un espectáculo del cual la prensa conservadora se ha hecho un festín. Dilectos y muy connotados políticos y lobistas que medraron durante los 30 años, hoy renuevan sus atuendos de cara a un eventual retorno a La Moneda. Uno de ellos conspicuo consultor de grandes grupos económicos, dentro de los que está SQM, llevó a un analista político -no sin una cuota de humor-, llamar a Tohá la “candidata no metálica”. Consciente de que esa compañía le resta más que lo que le suma, la precandidata Tohá, se ha apresurado a desmentir que tales señorones, sean su comando presidencial o sus asesores directos. Sin embargo, se han multiplicado las entrevistas donde estos venerables gurúes de los años 90’, ensalzan y llenan de elogios a Carolina Tohá, llegando al límite del absurdo, cuando uno de ellos sostiene, que ella sería la ministra del interior más importante de Chile desde el retorno a la democracia. Damos por descontado, que al igual que la presidenta Bachelet, muchos hombres y mujeres, a lo largo y ancho del país, estaremos con la candidatura que se imponga en las primarias del progresismo. La que por cierto podría ser Carolina Tohá que como ella misma señala: “Representa no cualquier progresismo. Representa la experiencia y a su generación”, Frases que al mismo tiempo que gustaron a muchos, causaron escozor en algunos otros, que ven en esta declaración poco menos que un aviso de despido, de sus cómodas posiciones gubernamentales. Recomiendo leer un poco de nuestra historia reciente, mal que mal no llegamos hasta acá producto del azar. Y lo que hoy disfrutan se construyó con décadas de esfuerzo y trabajo colectivo. Ahí está la grandeza de encontrar puntos en común, objetivos compartidos, igualdad de propósitos, con miras a un fin superior que nos trasciende a todos. En las elecciones de 2020, las fuerzas del actual FA, vetaron la participación del PPD en la primaria del progresismo, nunca se expresaron claramente las razones, pero eso impidió a las fuerzas del progresismo concurrir a una sola instancia. Los titubeos y vacilaciones de los partidos de la ex concertación, impidieron realizar una primaria del sector, y se terminó realizando una primaria convencional, donde la candidata de la DC Yasna Provoste derrotó a la candidata del PS Paula Narváez. En el ínterin quienes sí inscribieron primaria legal, fueron el PC y el recién creado partido Convergencia social, todos recordamos como el recién creado partido, sin historia ni estructura, lograba que su candidato Boric, derrotara al conocidísimo alcalde Daniel Jadue. Hoy uno está iniciando su último año de mandato, y el otro se encuentra cumpliendo arresto domiciliario, pero con deseos de intentar de nuevo una candidatura presidencial. La división y dispersión en múltiples expresiones, que no conversan ni se comunican, ha sido una de las causas más patentes de las derrotas del progresismo, tanto en 2009 como en 2017. En ambas ocasiones, a exitosos gobiernos de centro izquierda liderados por Michelle Bachelet, les sucedió el finado Piñera, a la cabeza de las fuerzas conservadoras. En 2017, por la centro izquierda y la izquierda llegaron a primera vuelta nada menos que seis candidaturas, las que sumaron 55,43%. Alejandro Guillier: 1.498.040 con 22,7% Beatriz Sánchez: 1.338.037 con 20,27% Carolina Goic Boroevic: 387.784 con 5,88 % Marco Enríquez-Ominami Gumucio: 376.871 con 5,71 % Eduardo Artés Brichetti: 33.665 con 0,51 % Alejandro Navarro Brain 23.968 con 0,36 % En tanto por el sector conservador concurrieron dos candidaturas, que sumaron 44,57%. Sebastián Piñera 2.418.540 con 36,64% José Antonio Kast 523.375 con 7,93% En segunda vuelta por la miopía o mezquindad política de los protagonistas, que no adhirieron oportuna y eficazmente a la candidatura de Alejandro Guillier, este obtuvo 45,42%, y se terminó imponiendo por segunda vez el presidente Piñera que obtuvo 54,58%. En las elecciones de 2017 el progresismo no realizó primaria, siendo entronizado Alejandro Guillier sin concurso ni sorteo como el candidato único. En esa ocasión el PS desestimó la candidatura del presidente Ricardo Lagos, que contaba con el apoyo del PPD y de la DC para la primaria. Por esta razón las fuerzas que integraron el gobierno de la Nueva Mayoría, que iban desde la DC al PC, actuaron disgregadas, ya que la DC optó por llevar su propia candidatura. En 2021, en las elecciones que permitieron el triunfo del FA con Gabriel Boric a la cabeza, todas las fuerzas del progresismo se sumaron, adhiriendo a su candidatura, para establecer un cerco sanitario a las ideas ultra conservadoras. Esa es la mejor y más próxima lección que los partidos tradicionales del progresismo, han dado a las nuevas generaciones de políticos gobernantes, actuar con generosidad y altura de miras, pensando en el bien de Chile. Eso ni más ni menos es lo que se espera de cara a las primarias presidenciales. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 10 de marzo de 2025.-

domingo, 2 de marzo de 2025

QUINCE AÑOS DE ALTERNANCIA

Y se apareció marzo, inevitablemente llegó el mes en que casi todo el país vuelve al trabajo, y a los colegios. La rutina retorna a las vidas de millones de familias a lo largo y ancho del territorio. Este año iniciamos con mejores cifras económicas, esperamos continúe la recuperación de la economía, pero sabemos también que es año de elecciones. De acuerdo a nuestro ciclo electoral que cada cuatro años permite renovar el liderazgo presidencial, y cambiar parcialmente la integración del parlamento, en noviembre tendremos la elección presidencial y parlamentaria. Este es el último año de la administración Boric, el año del pato cojo, aunque no guste mucho en La Moneda la denominación, lo cierto es que, en vísperas de la elección presidencial, el poder simbólico del ejecutivo comienza a mermar sustancialmente. Siendo sinceros en un proceso que todas las administraciones han vivido, y es natural. La administración saliente, tiene la natural esperanza de lograr transmitir a alguna figura de su sector la banda presidencial, pero el último que consiguió este objetivo fue el presidente Ricardo Lagos en 2006, cuando entregó la banda a la primera mujer en ejercer el cargo de presidenta de la república, la doctora Michelle Bachelet. Desde 1990 hasta 2010, se prolongaron los gobiernos de la concertación de partidos por la democracia, la alianza progresista que gobernó durante 20 años, los años de mayor crecimiento económico y desarrollo social del país. Siendo también la alianza política más exitosa electoralmente en toda la historia republicana. No obstante, este éxito innegable, desde 2010 hasta 2021 los gobernantes no han logrado la continuidad de su proyecto político. Es así como Michelle Bachelet debió entregar la banda presidencial a Sebastián Piñera, de la alianza política conservadora en 2010, rompiendo la continuidad de gobiernos progresistas. La derecha llegaba al poder mediante elecciones democráticas, por primera vez desde el retorno a la democracia. Pero, el proyecto de restauración conservadora tampoco pudo proyectarse, y en 2014, el país retomaba la senda progresista con un segundo mandato de la presidenta Michelle Bachelet. La alianza política que se instaló en La Moneda en esa oportunidad se llamaba Nueva Mayoría, e incorporó por primera vez, al partido comunista, que no integraba una alianza de gobierno desde el gobierno de la Unidad Popular. Tampoco esta alianza política estaba destinada a permanecer en el poder, ya que, concluido su período presidencial, la presidenta Bachelet entregó la banda por segunda vez al presidente Piñera. El ciclo de alternancia política cada cuatro años, se volvió a repetir en 2021 cuando el presidente Piñera hizo entrega de la banda al presidente Boric, a la cabeza de un conglomerado de fuerzas de izquierda. Como se ha vuelto tradicional en los últimos 20 años, ni conservadores ni progresistas se conforman con la pérdida del poder, e intentan hacer la vida imposible a sus adversarios, con una oposición tenaz, que obstruye la labor de gobierno. Se agrega a eso, la atomización de la política en decenas de minúsculos partidos, que eligen parlamentarios con votaciones enanas. La disgregación en múltiples alternativas, que representan opciones de nicho, cuando no emprendimientos individuales o familiares, han provocado una fuerte degradación de la calidad de la política. Y la consiguiente baja en la aprobación ciudadana, con porcentajes en torno al 4% de aprobación para el congreso y para los partidos políticos. En este escenario, no es raro que las figuras que concitan la mayor adhesión popular son las figuras políticas archi conocidas y con experiencia probada. En el sector conservador, es indudable que quien concitaba el mayor respaldo era el ex presidente Piñera, quien de no mediar su trágica despedida hace un año, estaría encabezando nuevamente las fuerzas de su sector. Quien lo reemplazó, es una política con altísimo nivel de conocimiento y es la que aun concita en las encuestas la mayor aprobación, la ex alcaldesa Evelyn Mathei. Un liderazgo tradicional, que hoy enfrenta por su extremo derecho, dos fuertes adversarios, que disputan el liderazgo del sector. José Kast que va por su tercera candidatura presidencial, la última derrotada en segunda vuelta por el presidente Boric. Y el diputado Johannes Kayser, quien al menos en las mediciones de opinión aparece concitando mayor adhesión, pese a que representa una alternativa de derecha extrema, como no se había visto en Chile desde el retorno a la democracia. Si el ciclo de alternancia política que hemos tenido en Chile en los últimos quince años, sigue su curso normal, este año nuevamente debiera imponerse una alternativa conservadora, y el presidente Boric, se vería entregando en marzo de 2026 la banda presidencial a una figura política de la actual oposición. La única variable que hoy podría alterar esa dinámica que todas las encuestas dan por ciertas, es el factor Bachelet. Una hasta ahora incierta posibilidad de que la presidenta Bachelet acepte encabezar un nuevo proyecto político. Lo ha negado reiteradamente, y siempre ha estado por promover a otras alternativas, tal como lo hizo en sus dos administraciones, instalando en el gabinete, a cuanto prospecto hubiera para asumir el desafío. Pero la política es así, una cosa son las intenciones, y otra cosa es la que resuelve la propia ciudadanía con sus preferencias. Y contra todo lo que la propia presidenta Bachelet ha dicho y ha hecho para promover figuras políticas, lo cierto es que lo que porfiadamente reflejan las encuestas, es que es Michelle Bachelet la única que concita el respaldo y la adhesión popular como para competir eficazmente en la presidencial de noviembre. Si las elecciones presidenciales fueran este domingo, con las candidaturas presidenciales que existen hoy, la más probable ganadora sería doña Evelyn, lo que cumpliría el ciclo de alternancia cada cuatro años. Chile continuaría a los bandazos del timón, a un lado y al otro, sin continuidad ni del proyecto progresista ni del proyecto conservador. El país entero en un eterno loop electoral, que va dejando cientos de materias pendientes, cientos de asuntos por resolver. Nuestro siempre postergado paso al desarrollo, depende en gran medida, de que las grandes definiciones, los grandes temas que conciernen al interés general de la nación, no se alteren por el cambio de inquilino de La Moneda. Lamentablemente, hasta ahora no se ha encontrado esa fórmula que nos permita, tener una hoja de ruta común. En esto se juega el éxito o fracaso de nuestro sistema democrático, en la posibilidad de generar consensos que trasciendan a los gobiernos. La adhesión al pacto social. Tan duramente cuestionado en 2019, y cuya modificación fue un fracaso del mundo político en los dos procesos constituyentes, requieren de un liderazgo integrador, un liderazgo capaz de sintetizar, no sólo distintos colores de un abanico de opciones políticas, sino también, brindar una luz de esperanza, un suspiro de alivio, a los millones de chilenos y chilenas, que luchan por el sustento y la seguridad de sus familias cada día. El gran temor del sector conservador es que su expectativa de triunfo, que ven tan cercano en este momento, pueda verse frustrada por una nueva candidatura de la presidenta Michelle Bachelet. Por su carisma, su experiencia, por el cariño que las personas le demuestran cuando aparece en cualquier lugar de Chile, no cabe duda, que es el liderazgo que mejor encarna los valores y las ideas del progresismo. Es un hecho de la realidad, una constatación. Algunos políticos pueden tener naturales expectativas o el deseo de competir en la presidencial, pero las cifras de distintas mediciones, demuestran que tales candidaturas ni siquiera llegarían a la segunda vuelta. En tal circunstancia, sólo podemos esperar la decisión de la presidenta Bachelet, para una elección presidencial competitiva, y que siente las bases de un nuevo período de estabilidad y crecimiento, el que nuestro país requiere con urgencia. Ernesto Sepúlveda Tornero Punta Arenas, lunes 3 de marzo 2025.-