domingo, 25 de abril de 2021

ERA QUE NO

 

            Se cuenta que, en medio de una crisis que hacía peligrar su gobierno, el presidente de Chile Ramon Barros, recibió una serie de telegramas, donde los ministros de su gabinete, le mostraban su apoyo. “Era que no”, fue la escueta y sabia declaración del presidente.

            Esta semana, pudimos leer en un matutino nacional, la “carta al director” de cinco ministros de estado, donde expresan que no es cierto, de que tengan una opinión contraria al presidente Piñera. Se refieren al requerimiento de La Moneda al tribunal constitucional. “Era que no”, debe haber pensado el superior jerárquico y jefe político de los ministros. Así estamos en Chile, amigos y amigas. En medio de la pandemia del siglo, con esfuerzos titánicos del sector salud, y de la población, por contenerla. Y al mismo tiempo, un mal gobierno, que cada día aporta más argumentos a sus detractores. Es que el presidente, después de la presentación ante el TC, para impedir un tercer retiro de ahorros previsionales, y de defender su postura, ante un país entero. En los últimos días anuncia, que está preparando su propio para realizar el tercer retiro. Es inentendible. Y ha sido fuente de descontento para la población, que empezó a salir a protestar nuevamente. También una causa para activar a un movimiento sindical, más bien silente el último año.

            En cuanto a la oposición, los últimos eventos, le dan una razón más para alcanzar la tan difícil y anhelada unidad. Todos miran lo que ha pasado en el Perú, donde más de una docena de candidatos, disputaron votos del mismo sector político, y hoy compiten en segunda vuelta los dos extremos.  Existen muchas razones para entender que la unidad de la centro izquierda, es la que permitirá continuar en carrera hacia La Moneda. Pero ninguna parece ser lo suficientemente poderosa, para llegar con candidatura única a la primaria presidencial.

            Esta semana, las dos candidatas de centro izquierda Paula Narváez y Ximena Rincón, hicieron una inédita propuesta conjunta. Plantearon al gobierno, la necesidad de establecer una renta básica nacional, que permita a las personas, sin distinción, sobrellevar esta crisis. El gesto tiene un fuerte simbolismo. Es un rechazo al intento de algunos de marginar a la DC, y es un desafío a los varones candidatos del mismo sector político. Al igual que en Perú, nos acercamos a las elecciones, sin rastros de lo que quieren los electores. Las encuestas políticas, han sufrido los efectos de la pandemia, y hoy sólo muestran  magros resultados para todos. Su poder predictivo, está en duda. Y por tanto ninguna decisión, se tomará, como en aquella infausta jornada de 2017, cuando por ese argumento, se desechó la candidatura del presidente Lagos.

            Son tiempos inciertos para todos. En la derecha, la eclosión de candidatos, no produce mayor entusiasmo, aunque recorran matinales, y revistas de papel cuché, son expresiones marginales. Difícilmente se distingue una candidatura de otra.  Las dificultades para desplegarse en campaña, por las restricciones sanitarias, son suplidas por algunos, recurriendo a lo más tradicional y predecible. En el caso del PC, los ritos y formas de un anunciado comité central, que proclama, sin sorpresa alguna, al alcalde Jadue, como su candidato. En otros casos, se da el salto a las plataformas virtuales. No sin cierto riesgo, debido a la sobre saturación de la oferta multimedia, donde la entretención, el estudio, y el trabajo, usan los mismos espacios virtuales. Creo, que la forma en que está usa estos medios, la candidatura de Paula Narváez, es una apuesta valiente, y que representa un gran realismo. Simplemente, no vamos a volver a las plazas y a las ferias libres, ni a los teatros o estadios, para grandes manifestaciones públicas.

            Debo reconocer, que no me convencía mucho esto de la actividad política, por zoom o Google meet. Sin embargo, he tenido ocasión de participar en dos actividades, de la candidatura de Paula Narváez, y más allá, de que es mi candidata. Debo decir, que estoy gratamente sorprendido, de la forma en que se está empleando estas herramientas virtuales. Conversando posteriormente con personas que también participaron, se comprueba: Es mejor que las dinámicas tradicionales, porque se puede interactuar más con la candidata; el trabajo en grupos es más dinámico, se va a la medula en los temas; existe una transversalidad desconocida en las campañas tradicionales. En lo que respecta a los temas que me interesan sobre desarrollo regional y descentralización, así como en cuanto al plan de zonas extremas, para Arica Parinacota, Aysén y Magallanes, quedo totalmente satisfecho. La candidata Paula Narváez, no sólo está al tanto de lo que ha significado el PEDZE en Magallanes, sino que es partidaria de que se establezca como una política regional de desarrollo, permanente. Que no dependa de los gobiernos de turno. También apoya un fortalecimiento de la ley de rentas regionales, para un financiamiento efectivo de las regiones. Así mismo, manifestó su disposición a revisar la figura del delegado presidencial, para reducir sus atribuciones y competencias, potenciando al gobernador regional. En mi opinión el delegado presidencial, debiera eliminarse, pero con toda seguridad será materia de discusión constituyente.

            La semana concluyó con la esperanza de que el presidente, acepte el planteamiento de la presidenta del senado Yasna Provoste, y retire su requerimiento al TC, y promulgue el proyecto aprobado ampliamente en el parlamento. Sería una señal de sensatez, que permitiría descomprimir la tensión social acumulada, aliviar el dolor y la angustia de millones de personas.

            Para evitar el mal gobierno, debe apoyarse alternativas viables, innovadoras, con el coraje de desafiar el estatus quo, yo apoyo a una candidata de regiones.

Ernesto Sepúlveda Tornero

domingo, 18 de abril de 2021

EL CENTRO ANTARTICO INTERNACIONAL

                                              Durante esta semana, nos enteramos en Magallanes, que la etapa de ejecución del proyecto Centro Antártico Internacional (CAI), había ingresado a evaluación técnica en el ministerio de Desarrollo Social. Un paso largamente esperado, para un proyecto emblemático del plan de zonas extremas. El diseño realizado por la oficina del prestigioso arquitecto Alberto Moletto, se adjudicó luego de un concurso público internacional, donde participaron más de 70 proyectos.  El edificio representará un hito arquitectónico en la ciudad, y constituirá un centro de investigación, donde concurrirán cientos de científicos, tanto chilenos, como extranjeros. Se proyecta que prestará servicios a las misiones antárticas, de las principales potencias del mundo. Sus museos, acuarios, y centro de eventos, brindarán a la comunidad magallánica, un lugar de paseo y esparcimiento. Y constituirá un polo de atracción turística, y polo de desarrollo económico, tal como lo son otros centros, construidos tanto en Nueva Zelanda como Australia.   

                        El mecanismo de evaluación económica, de los proyectos del Plan de zonas extremas, lo ha efectuado el Ministerio de desarrollo social, bajo un enfoque de costo eficiencia. Esto ha permitido la aprobación de la totalidad de la cartera PEDZE. Se espera que la etapa de ejecución de este proyecto, siga este mismo camino.

                        La totalidad de la inversión pública en Chile, debe cumplir con un riguroso procedimiento, donde participan organismos políticos, como el Consejo regional, y organismos técnicos como  el Ministerio de desarrollo social, y las unidades formuladoras, tanto del gobierno regional, como de los ministerios sectoriales. Es a este procedimiento, que los distintos gobiernos, deben respeto. Constituyen la institucionalidad, que nos hemos dado como país, para asegurar que la inversión pública, satisfaga las necesidades sociales, las necesidades de la población, identificadas y descritas en cada proyecto.

                        Esta no es solo preocupación de burócratas, sino de todo ciudadano, por lo que ha llamado mucho la atención, la opinión emitida por la actual intendenta regional, quien, a propósito del ingreso a evaluación, del proyecto CAI, ha manifestado que “Hoy las prioridades son otras”. Aludiendo a que las necesidades sanitarias, y de la reactivación económica, harían desviar los recursos de este proyecto.  La máxima autoridad regional, no tiene competencia alguna en la evaluación técnica de proyectos. Constituye un serio error, el adelantar un juicio negativo acerca del proyecto CAI, cuando el ministerio de desarrollo social, recién inicia la evaluación técnica. Por otra parte, el plan de reactivación económica, diseñado por los ministerios sectoriales en la capital, involucra inversiones multimillonarias en todo el país. En una primera etapa se anunciaron 155 proyectos en todo Chile, todos de gran magnitud. Magallanes brilla por su ausencia, con escasos proyectos, incluso algunos ya terminados.

                        A un mes de las elecciones de gobernador regional, no parece razonable, que la última intendenta regional designada, pretenda alterar la marcha de proyectos que vienen en desarrollo, hace 7 años. Una de las tareas principales, del primer gobernador electo por el voto popular, será concretar la cartera de proyectos en ejecución. Despejar nudos de gestión, apurar los tramites administrativos. Acelerar la marcha de las licitaciones. Reducir el tiempo de tramitación de los proyectos. Se requiere habilidades de gestión, pero es la forma mas concreta de dar respuesta, a las necesidades de la población.

                                    No vamos a aceptar, que la construcción del Centro Antártico Internacional, sea dilatada, por decisiones políticas equivocadas. Seguiremos adelante con este proyecto, así como hicimos en su momento con el CADI UMAG. Otro centro científico, construido con el Plan de zonas extremas. Ha sido fundamental, en el combate contra el Covid, al permitirnos realizar en Magallanes, decenas de miles de análisis de test PCR, en su laboratorio de biología molecular.

                                    Estoy seguro que los magallánicos y magallánicas, valoran la importancia de los proyectos del Plan de zonas extremas, y el aporte sustantivo al desarrollo regional, y respaldarán la continuidad de los proyectos PEDZE. Es la tarea bien hecha, obras son amores.

Ernesto Sepúlveda Tornero

 

domingo, 11 de abril de 2021

TRABAJO Y SOLIDARIDAD

             Las galopantes cifras de la pandemia Covid, en las principales regiones de Chile, ha  generado una serie de interrogantes acerca de la estrategia sanitaria. El establecimiento de prolongadas cuarentenas y el confinamiento masivo de la población, parecieran no ser suficientes, para reducir la tasa de contagios.  Un aprendizaje que le ha servido también a otros países, es que una exitosa campaña de vacunación, no basta para impedir que se siga propagando el virus. Nuestra etapa actual, demuestra que estamos lejos de cantar victoria. Reducir la movilidad es una parte, lograr una más eficaz estrategia de testeo, trazabilidad y aislamiento, es algo fundamental. De lo que vivimos en el territorio de la zona extrema, Magallanes, podemos aportar también algunas enseñanzas. Al cabo de un año de confinamiento en base 1 y fase 2, logramos pasar a fase 3, y en localidades mas pequeñas, a fases superiores. Con una exitosa y masiva vacunación, seguimos entre las regiones con mas bajos casos. Sin embargo, nuevamente están surgiendo focos de contagio, en los mismos lugares que hace un año atrás. También se empieza a producir la multiplicación de eventos de reuniones sociales, y fiestas si respetar aforo. Muchos tememos, que se vuelva a producir la misma escalada de 2020.

                        Por lo pronto, resulta imprescindible, replicar experiencias exitosas de prevención, implementadas en los sectores esenciales. Particularmente en el sector construcción. El establecimiento de controles preventivos, aplicación de test de antígeno. EL cual se obtiene su resultado en escasos minutos, ha sido un elemento fundamental para evitar los focos, en las áreas productivas. Pero esta estrategia, requiere no sólo, el apoyo de las autoridades, para que pueda ser replicado en toda actividad laboral, que se este desarrollando. También requiere del compromiso de los empleadores y sus trabajadores. La colaboración es esencial. Y esa voluntad de aportar a la seguridad sanitaria de todos, de la comunidad, se debe demostrar cada día, Respetando horarios de toque de queda, aforos máximos, distancia física, y por supuesto uso de mascarilla y lavado de manos. Pero también, al momento de entregar información fidedigna y completa a las pesquisas sanitarias. Lo vimos acá en Magallanes, el año pasado, cuando estábamos en el peack de contagios. Las personas Covid positivas, informaban como máximo dos contactos estrechos. Se ocultaba la información de las demás personas, por temor a perjudicarlas. Una pésima lectura de la realidad. Y una irresponsabilidad, no sólo consigo mismos, sino con sus familias y entorno cercano.

                                    Dentro de todo este escenario de preocupación, hay esperanzas. No sólo en la construcción despliegan esfuerzos, también lo ha hecho la minería, el sector acuícola, la agricultura. Por su parte la autoridad del trabajo, ha aportado, aclarando las facultades que dentro de la pandemia Covid, tiene el empleador. En concreto, se reitera su obligación de adoptar, todas las medidas necesarias para proteger la vida y salud de sus trabajadores. Se establece que el empleador en cumplimiento de esta obligación, puede disponer la toma de muestras PCR, para catastrar contagios en el ámbito laboral. Siempre y cuando se respete los derechos fundamentales de los trabajadores. Esto resulta muy importante, para la tranquilidad y seguridad de los trabajadores. Asimismo, en los sectores esenciales de la economía, se ha implementado un programa de vacunación Covid, que ha tenido una excelente acogida entre los trabajadores. Y huelga decir, que promover la vacunación de todos los trabajadores y trabajadoras, resulta imprescindible, si aspiramos a superar esta etapa de la pandemia.

                                    Con toda seguridad, en las próximas semanas, seguiremos con cifras altas de contagios a nivel país, por lo que debemos seguir esforzándonos cada quien desde su lugar y de su área, para hacer un aporte positivo, para aliviar a los demás. En lo que respecta a nuestra región de Magallanes, debemos insistir en una conducta de responsabilidad. No podemos volver a repetir los errores del año pasado. Sectores altamente intensivos en mano de obra, en faenas de temporada, deben extremar cuidados, tomar los test PCR y test de antígenos antes de iniciar faenas. Y catastrar periódicamente a la totalidad de sus trabajadores. Por otra parte, quienes incurren en infracciones a las prohibiciones y restricciones sanitarias, deben ser sancionados como corresponde. Pero desde ya, que reciban la sanción de una sociedad indignada con justa razón.

                                    Aún nos queda mucho por recorrer, pero desde otros continentes, nos llegan luces de esperanza. En Israel, ya han retornado a las actividades normales, lo único que está detenido es el transporte aéreo internacional. Después de un masivo y acelerado proceso de vacunación, han reducido a niveles mínimos los contagios. Tan es así, que ya se autoriza circular sin mascarilla, y sin distanciamiento físico.

                                    Aún estamos, muy lejos, de llegar a eso, pero lo podemos lograr, y esperamos que todos quienes ejercen una actividad pública, los líderes de opinión, y también a los ciudadanos y ciudadanas, que esperan representarnos en las elecciones de mayo próximo, se unan en este clamor. Pedir responsabilidad, colaboración, respeto. La solidaridad ahora, tiene rostro, nombre y apellido, son los miles de trabajadores y trabajadoras sanitarios, que se la están jugando toda, por salvar vidas. No debemos fallarles.

 

Ernesto Sepúlveda Tornero

domingo, 4 de abril de 2021

UN PAÍS ESPERANDO LA ELECCIÓN

 

                        Al cabo de un año de esfuerzos, para controlar la pandemia Covid, en Chile los resultados son alarmantes. Sólo 32 de las 346 comunas existentes, se encuentran en fase 3 o superior. El 95% de la población del país se encuentra en cuarentena. Más de 30 mil personas fallecidas, y más de 8 mil contagios diarios, son cifras que hablan por sí solas. Todos los dardos apuntan a la zigzagueante estrategia del gobierno. Medidas como el permiso de vacaciones, autorizaciones de apertura al gran comercio, mantener abierto el aeropuerto a viajes internacionales, fueron adoptadas contra las recomendaciones de los expertos. Todo hace pensar que esas decisiones, fueron tomadas por el propio presidente Piñera. 

                        Cuando estábamos mas orgullosos, de lo bien que lo estábamos haciendo como país, con el programa de vacunación. Las 30 mil personas que partieron, muchas sin siquiera poder despedirse de sus familias., claman al cielo, exigiendo respuestas, exigiendo responsabilidades. La situación sanitaria, urge y demanda de todos, pero principalmente del gobierno, un cambio de enfoque. Aunque sólo quede un año de esta administración, las tareas de gobierno son indelegables, y se deben implementar todas las medidas que la situación amerite. No es tiempo de ortodoxias monetaristas, es el tiempo de un rol mas activo del estado. Una renta básica universal, que parecía utopía de izquierdistas trasnochados. Hoy es algo que aliviaría a esas personas, que han tenido que seguir saliendo a trabajar, en los momentos más álgidos de la pandemia. La ultra focalización del gasto social, es una estrategia que fracasó. Fue ineficaz para impedir la movilidad, y cortar la cadena laboral de contagios.

                          Es el momento de la política, de las grandes decisiones. El país clama por soluciones. No es tiempo de sacar ventaja, de los desastres y de los errores garrafales, del mal gobierno. Es tiempo de construir, de aportar. Quienes aspiran a gobernar mañana, tienen la primerísima responsabilidad. Ya no se puede sacar más rédito de las chambonadas del adversario. Hay que pensar en el país. Y es lo que debemos hacer todos, los que emprendemos, los que le ponemos el hombro cada día, los que vivimos vicisitudes, los que damos empleo. Todos tenemos que hacer nuestra parte. Siendo responsables, ni vacaciones, ni fines de semana largo, ni fiestas, ni borrachos saltándose el toque de queda. En los próximos meses, se juega la parte más importante de este partido, y debemos llegar todos al final.

                                 No es fácil, no se trata de tranzar las diferencias legítimas que tenemos, ni de hacer causa común con quien está dañando a Chile. Por el contrario, se trata de hacer un esfuerzo, para dejar de lado, el deporte favorito de hoy día. Dejar de lado la animosidad, contener la bronca. Está difícil. Vivimos tiempos, donde la paciencia no existe. Las personas están agotadas, hastiadas. Y en redes sociales, sobre todo, se pasa de un simple intercambio de opiniones, al insulto o a la amenaza. El tema es muy delicado, y quienes ejercen hoy el poder, deben actuar con prudencia. El país no tolera ya más improvisaciones, ni más decisiones de personeros invisibles, o decisiones unilaterales de un presidente, en caída libre. Desde luego, no se tolera más injusticias. Alzas unilaterales e injustificadas de los planes de salud, por ejemplo. Ya no resiste análisis.  Otras noticias, que antes sólo provocaban sorpresa, ahora provocan indignación. Por ejemplo, el enésimo anuncio de ganancias multimillonarias del sector financiero, en plena crisis económica, y en plena pandemia. O más recientemente, la noticia de ganancias siderales, de los negocios del presidente Piñera, administrados por un fideicomiso. Estoy seguro que ambas situaciones, se justifican legal y reglamentariamente. Es posible, incluso, que el caso de cuestionamientos al fideicomiso del presidente, no lleguen a acreditar delito ni falta. Pero lo que sí, es innegable, que mientras el país entero está sumido en una crisis de proporciones históricas, es impresentable, que la banca continúe estrangulando a las personas y a las mypes, y aumente ganancias, sobre los pulmones y los huesos de sus clientes. Lo del presidente y sus negocios, ojalá lleve a poner coto al vínculo entre dinero y política. Lo que claramente no se hizo en su caso, ni en 2010 ni en 2017, ni tampoco ahora en 2021. Sólo queda esperar mayor éxito en la regulación futura.

                                               Pese a todo, soy optimista, por la experiencia de nuestra tierra de Magallanes, se que, sosteniendo una restricción prolongada, y con un mediano esfuerzo ciudadano, se logran bajar los índices. Nosotros nos demoramos 1 año, entre fase 1 y 2.  También creo que podremos ponernos de acuerdo, por muy disimiles que sean nuestros puntos de vista. Existen puntos donde coincidimos una inmensa mayoría. El principal, trabajar para superar el mal gobierno. En mi caso, desde la centro izquierda, desde el progresismo, podemos construir una alternativa que no polarice más al país, que no profundice las diferencias, ni alimente las odiosidades. Trabajar para construir, un esfuerzo colectivo, que aúne voluntades, que integre.  Sólo así superaremos la grave crisis social, económica y política de nuestro país.

Ernesto Sepúlveda Tornero